El dinero no da la felicidad, pero tampoco es un inconveniente para conseguirla. La búsqueda de la felicidad es el gran objetivo de la mayoría de los seres humanos y en este complejo tránsito siempre acaba apareciendo de una manera u otra el dinero.
Pero puestos a cuantificar algo difícilmente cuantificable como es este estado de ánimo hay varias teorías al respecto sobre cuál es la cantidad de dinero necesaria para ser feliz. Son obviamente cifras aproximadas en función de variables que puede que tú no contemples o te afecten pero es un punto de partida por si un día accedes a disponer de esas cifras que no están al alcance de cualquiera.
Uno de los expertos que se pronunciado sobre la hipotética cantidad de dinero para ser feliz es el economista Santiago Niño Becerra, uno de los pocos que vaticinó la crisis del 2008, que destacó en una entrevista en Catalunya Radio un estudio elaborado por la Universidad de Harvard hace una década que señala la cantidad de 75.000 dólares anuales, unos 69.000 euros al cambio actual. Es decir, casi 5.000 euros mensuales por 14 pagas, una cantidad que cobran muy pocas personas en España.
Por su parte el matemático Santiago García Cremades aseguró en el programa Cuatro al día que la cifra ideal estaría en "unos 54.000 euros si tenemos una familia con un hijo y con dos hijos de 72.000 euros al año”.
Por su parte los premios Nobel de Economía Daniel Kahneman y Angus Deaton, suben la apuesta y cifran en 75.000 euros anuales por persona la obtención de la felicidad, según La sexta . Con un dato curioso, ya que afirman que una vez logrados esos 75.000 euros, el precio a pagar por esa felicidad será más caro. Es decir, a partir de esa cantidad, habrá que pagar mucho por muy poca felicidad.
Otro experto, Tim Hartford, explicaba en el Financial Times un método alternativo para calibrar el coste de nuestra felicidad: en vez de pensar primero en la cantidad de dinero necesaria para ser feliz; recomienda detallar lo que necesitaríamos cada uno para llegar a serlo y después, calcular en dinero lo que nos costarían esas ambiciones.
Pero estos no son los únicos que teorizan sobre una pregunta crucial para para muchas personas. Un estudio llevado a cabo por el psicólogo Andrew T. Jebb, de la Universidad de Purdue, y publicado en la revista Nature Human Behaviour, indica que para aspirar al bienestar emocional una persona necesita anualmente entre los 50.000 y los 60.000 euros.
A la Universidad de Harvard parece que le preocupa este debate, ya que en 2018, estudió a los casos de varios multimillonarios antes de sentenciar que son necesarios 8 millones de dólares (7,3 millones de euros al cambio actual) para sentirse contento y feliz. Casi nada.
Aunque son legión los que piensan que a más dinero se logra más felicidad a veces ser rico o muy rico genera problemas se salud y mayor riesgo de sufrir depresión, ansiedad, dependencias varias o trastornos alimentarios. Prueba de que la felicidad es un estado de ánimo al que se llega con una serie de cualidades, dedicación y esfuerzo, no tanto con mucho dinero.