A veces placenteros, otras veces aterradores... y muchas veces raros e inconexos. El universo de los sueños es infinito y, a pesar de que se existen múltiples teorías sobre la interpretación que hacemos de ellos, no existe una verdad absoluta sobre ello.
Los sueños sirven para desarrollar el sistema nervioso, afianzar la memoria, procesar emociones reprimidas, selección de información relevante y muchas cosas más. Por eso, la interpretación de los sueños y la exploración del inconsciente se convierten en ejercicios de introspección de lo más útiles.
De ello hemos hablado esta mañana en el magazine de Imanol Arruti con el terapeuta Mikel Ormazabal, que nos ha hablado de lo reparador que es el descanso, de cómo trabaja nuestro cerebro cuando dormimos y de qué manera podemos encontrar traumas, preocupaciones o inquietudes que guardamos en el inconsciente.