Reducir la elevada tasa de temporalidad en la enseñanza pública, que el último informe del ConsejoEscolar de Navarra cifra en un 40% pero que, según fuentes sindicales, supera el 50% si se contabilizan las contrataciones que se realizan durante el curso por permisos o enfermedad, fue una de las reivindicaciones por la que salieron a la calle cientos de docentes. En el día después, los sindicatos convocantes de la huelga (LAB, Steilas, CCOO, ELA y UGT) mostraron ayer su satisfacción por el seguimiento registrado en el ámbito educativo, que cifraron en más de un tercio del profesorado, y avisaron de que seguirán defendiendo todas las demandas en mesa sectorial. Entre ellas destaca la reducción de las ratios, que ha concitado la unión sindical en una propuesta que plantea bajar de 25 a 20 escolares por aula en Infantil y Primaria; de 30 a 23 en ESO; y de 33 a 27 en Bachillerato. El objetivo: ofrecer una educación más personalizada y mejorar la calidad educativa.
Según los datos ofrecidos por el Gobierno foral, el 17,4% del profesorado secundó el paro convocado en la Administración, un porcentaje que superó el registrado en el ámbito sanitario y en Núcleo. Ahora bien, los sindicatos elevaron ayer a más de un tercio el seguimiento entre el profesorado “pese a las trabas de algunos equipos directivos y a unos servicios mínimos abusivos”. Un respaldo que les anima a seguir reivindicando “la necesidad de que exista una negociación real en la mesa sectorial”.
Precisamente todos los sindicatos presentes en ese foro (LAB, Steilas, Afapna, Anpe, CCOO, ELA y UGT) han elaborado una propuesta de bajada de ratios para poder mejorar la calidad educativa en Navarra. “El pacto por la calidad educativa exige negociar el tema de las ratios pero apenas se ha hecho nada”, afirma Raúl López, de Steilas, que añade que “el alumnado de incoporación tarda no deja de crecer en los últimos años y los centros se quejan de que no se están desdoblando grupos ni hay recursos”.
La propuesta sindical plantea reducir las ratios en Infantil y Primaria de 25 a 20 escolares por aula. Ese curso, Educación bajó de 25 a 23 en los grupos de 1º de Infantil de los colegios con más alumnado desfavorecido y de cara al próximo 2023-24 ha anunciado que en estos centros la ratio en 3 años será de 20 escolares.
En ESO, los sindicatos piden bajar de 30 a 23 alumnos por clase; en Bachillerato, de 33 a 27; y en FP, de 20 (que puede llegar a 25 con repetidores) a 15; y en FP Básica, de 12 a 8.
PROPUESTA DE RATIOS
Propuesta conjunta de todos los sindicatos de la mesa sectorial. Los sindicatos de la mesa sectorial de Educación (LAB, Seilas, Afapna, Anpe, CCOO, ELA y UGT) comparecerán el 28 de febrero ante la comisión de Educación para explicar a los grupos su propuesta de bajada de ratios.
1) INFANTIL y PRIMARIA: de 25 a 20 escolares por clase.
2) ESO: de 30 a 23 escolares.
3) BACHILLERATO: de 33 a 25 escolares por aula.
4) FORMACIÓN PROFESIONAL: La ratio actual es de 20 en grado medio y hasta 25 con repetidores, con carácter general y se plantea bajar a 15; y en los grupos de FP Básica, de 12 a 8.
Luchar contra la sobrecarga burocrática
Con esta petición de reducción de ratios, los representantes del profesorado buscan rebajar la sobrecarga laboral. “Hay una sobrecarga pedagógica ya que el alumnado cada vez es más diverso y en los centros se trabaja cada vez más con metodologías activas lo que complica la tarea docente y también una sobrecarga burocrática”, afirma López, que añade “el Departamento exige al profesorado alimentar el programa Educa con datos y el profesorado no entiende para qué se pieden estos trabajos que les quita tiempo de otros que ellos consideran esenciales”.
En esta misma línea, Silvia Domínguez, de CCOO, asegura que “no se puede atender la diversidad existente en las aulas con 27, 30 y hasta 33 escolares por clase” y aseguró que la “sobrecarga laboral que padecen los docentes, por la excesiva burocracia y papeleo, que va en detrimento de una atención individualizada del alumnado ya que les quita tiempo de preparación de clases, de formarse...”.
En cuanto a la elevada temporalidad, Domínguez exigió a Educación que “saque a OPE todas las plazas temporales” y aseguró que con las 767 convocadas en los concursos de méritos de este año y la OPE de 2024 “no se va a llegar ni de lejos al 8% como asegura Educación”. Y es que, según datos del Consejo Escolar, en 2021-22 había 9.207 docentes en la red pública de los que 3.714 eran temporales (40%).
Para Oihane Jordana, de LAB, la sobrecarga de trabajo y la temporalidad de las plantillas, que en algunos centros asciende al 70%, perjudica la calidad educativa.