Política

Cuatro generaciones en el Alderdi Eguna

Iker Goiria acudirá el domingo a Foronda en familia tal y como hacía en su infancia
Cuatro generaciones en el Alderdi Eguna

Este guipuzcoano pertenece a la tercera generación de la familia Goiria que participa en el Alderdi Eguna. Sus aitites y amamas, así como su ama y su aita fueron testigos de la primera edición en Aralar. Poco después él y su hermano se sumaron a la fiesta. Sus primeros recuerdos se remontan a los Alderdi Eguna itinerantes que se celebraron en Itziar y en Aiegi.

Varias generaciones de los Goiria. Cedidas

Este alderdikide dice que esta cita ha acompañado su ciclo vital. Acudió a sus primeras fiestas en familia, después se sumó a las acampadas de EGI, y con el paso de los años y la llegada de los hijos, ha vuelto a la esencia de sus primeros Alderdi Eguna y acude a Foronda con su familia. “Mi hijo mayor tiene doce años y la primera vez que fue a un Alderdi Eguna tenía nueve meses. Ver unidas a tres generaciones para nosotros es una pasada. Ya son cuatro generaciones de mi familia las que han participado”, asegura con satisfacción.

Iker Goiria junto a su padre e hijo Cedidas

Iker recuerda los Alderdi Eguna cuando era niño con mucho cariño. “Íbamos en autobús, y en Salburua nos encontrábamos con mis aitites y amamas. Recuerdo a mi amama haciendo talos en la txosna de Amorebieta. Cómo nos juntábamos la familia para comer tortilla o filetes empanados con pimientos detrás de la txosna. Era algo muy especial y bonito…con las ikurriñas. Lo pasábamos muy bien”, relata.

En cuadrilla con EGI

Con la adolescencia llegaron las acampadas de EGI: “Ya es otro tipo de Alderdi. Nos juntábamos miles de jóvenes. Más allá de las convicciones políticas, hacías amigos. Conservo todavía amistades de aquella época, y te reencuentras con ellas en el Alderdi Eguna”. Iker rememora que no todo era diversión, sino que también había trabajo. “Desde el miércoles ibas a montar la txosna. Hacíamos turnos de vigilancia, pero te lo pasabas bomba. El domingo acababas muy cansado y cuando llegaban tus padres llevabas dos días sin dormir”, sonríe.

En aquella época le marcaron los discursos de Xabier Arzalluz. “Lograba erizarnos a piel. Nos levantaba del suelo. Nos ponía a aplaudir. Eran espectaculares. Todos íbamos a escucharlo y además nos pilló en una época muy especial”, explica.

Iker Goriria junto a Xabier Arzalluz. Cedidas

Vuelta a los orígenes

Y a los Alderdi Eguna con EGI, les siguieron citas más tranquilas. “Te sigues encontrando con esas personas que van teniendo hijos, y sigues pasándolo bien, pero de forma más pausada”. Ahora Iker sigue sin perderse un Alderdi Eguna. Ha vuelto a celebrarlo en familia y a retomar la tradición de las comidas con todas las generaciones de su familia que marcaron su niñez. Se siente orgulloso de que sus hijos participen de forma activa en el Alderdi Eguna. “Es muy gratificante. Sobre todo, cuando ves el desapego que la juventud siente por la política. Lo que encontramos en el Alderdi Eguna es una forma de vida, un sentimiento de amor hacia Euskadi, hacia tu pueblo y hacia los que lo viven como tú”, concluye. Iker no oculta su tristeza al recordar la cita de 2021 cuando se celebró un acto restringido para respetar las medidas de seguridad frente a la covid-19. “Lloré mucho. Me dio mucha pena el ambiente de tristeza que se respiraba y ver a mucha gente con la que hacía tiempo que no coincidías, y no poder abrazarla. Fue muy duro”. Por eso, la celebración será muy gratificante el próximo domingo.

22/09/2023