Cuatro letras a Maialen Chourraut

Deportista de la que es imposible no sentirse orgulloso: Ya la escuché el sábado, cuando se clasificó a golpe de oficio para la final del K-1 eslalon, que no había dado su mejor versión en esas cabritas aguas del canal de Vaires-sur-Marne. Para el día siguiente, debería sacar a la artista (palabras textuales) que llevaba dentro. Pero se impuso, por desgracia, el titular clásico: "No pudo ser". Se comió una jodida puerta y, a partir de ahí, quedaba poco que hacer. Solo aplicarse para terminar la competición con la cabeza alta. Y eso es lo que hizo. Cuando volvieron a ponerle un micrófono, no tiró de excusas. El obstáculo lo era igual para usted que para el resto de las competidoras, y, simplemente, no fue capaz de sortearlo. Ha demostrado largamente que sabe ganar. Y, aunque no había dudas, también que sabe perder.