Instructor por sus puñetas de la causa sobre (¿o contra?) Begoña Gómez: Lo cierto es que ya tenía una curiosa bibliografía presentada por actuaciones judiciosas entre lo lisérgico y lo inaceptable, pero es ahora cuando ha alcanzado el estrellato gracias a la causa que le abrió a la esposa del Gobierno español a partir de un puñado de fotocopias de noticias de una cierta prensa que le presentó el falso sindicato Manos Limpias. Tacita a tacita, el sumario fue engordando y el otro día, siguiendo el viejo lema “sujétame el cubata”, anunció en plena campaña electoral la citación de Gómez para dentro de un mes. Segunda muesca en su mazo, consiguió que Sánchez volviera a dirigir otra epístola “a la ciudadanía” y, ante el pifostio, en lugar de taparse, se marcó un escrito presumiendo de su hazaña. Se está gustando.
Actualidad
Cuatro letras al juez Juan Carlos Peinado
Justifica su trato a Begoña Gómez