El president de la Generalitat, Pere Aragonès, ha pedido que no se "abarate" la ley de Amnistía y ha animado a que se apruebe en el Congreso de los Diputados "cuanto antes".
"No abaratemos la ley de Amnistía, es sólida, aprobémosla cuanto antes", ha subrayado Aragonès en una entrevista en el diario 'El Periódico' este domingo.
El president de la Generalitat ha explicado que ya se verá después de la aprobación si hacen falta otras medidas y se ha mostrado "absolutamente convencido" de que esta ley de amnistía tal y como está redactada a día de hoy incluye al expresident de la Generalitat Carles Puigdemont.
Además ha catalogado de "aberración" la decisión del Tribunal Supremo de abrir causa penal contra Puigdemont y el diputado de ERC en el Parlament Ruben Wagensberg por terrorismo en relación con el caso 'Tsunami Democràtic'.
Aragonès ha asegurado que el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, "tendrá estabilidad si cumple los acuerdos", al menos por su parte.
Cuenta atrás en marcha
La cuenta atrás para desatascar la ley de Amnistía en el Congreso vuelve a ponerse en marcha a partir del lunes, ya que la ampliación del plazo que pidió el PSOE para acordar un nuevo texto cumple el próximo jueves, día 7, y la Comisión de Justicia del Congreso parece decidida a sacar adelante el dictamen.
A ello se suma el borrador de la Comisión de Venecia que el PSOE ha acogido como un aval a su tesis de que esta medida "es perfecta" para la "reconciliación" en Catalunya y Junts no ve con malos ojos porque dice que le da la razón en que la norma debe tener cobertura "integral".
Desde el Gobierno se confía en que esta sea la semana clave para dar salida a la amnistía y el ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, ha recordado que la decisión del Tribunal Supremo de investigar al expresidente catalán Carles Puigdemont sobre Tsunami Democratic debe verse como un "trámite procesal" al afectar a aforados pero "no decide calificar como terrorismo ningún hecho".
Y es que el escollo de la negociación con Junts se centra en que la ley de Amnistía cubra todo tipo de delitos de terrorismo, aunque fuentes cercanas al grupo parlamentario de Sumar -socio de coalición del Gobierno- creen que Junts ya se ha percatado de que la norma no puede seguir esperando.
Buenas señales
Las señales a los independentistas catalanes para desbloquear la ley llegan del PSOE y de ERC, y mientras el primer secretario del PSC, Salvador Illa, afirma que le "gustaría" que la decisión del Supremo contra Puigdemont no sea "ningún obstáculo" para seguir tramitando la ley y María Jesús Montero cree que tampoco debería "interferir", fuentes de los republicanos insisten en que la ley tal y como está "es una buena, robusta y garantista".
De momento, la discreción ha protagonizado las negociaciones y en los últimos días el peso en Junts lo ha llevado su portavoz en el Congreso, Miriam Nogueras, después de que el secretario general de JxCat, Jordi Turull, haya sufrido una crisis cardíaca y hasta el viernes no recibiera el alta hospitalaria.
"Nunca hemos dejado de negociar", apuntaba Nogueras estos días en los pasillos del Congreso sin desvelar si habrá nuevas enmiendas y después de que se haya enfriado una posible modificación de la ley de Enjuiciamiento Criminal para limitar los plazos de instrucción judicial.
"Nos concentramos" en este asunto y "esperamos que al final haya un acuerdo", remarcaba el líder de Junts desde Estrasburgo (Francia), al tiempo que el presidente de la Generalitat catalana, Pere Aragonés, incidía en que la amnistía "es más necesaria que nunca" y espera su aprobación "pronto".
A la espera de si hay o no pacto el Parlamento europeo ha pedido "transparencia total" ante la UE sobre las negociaciones y una delegación del Congreso y del Senado se prepara para visitar a la Comisión de Venecia que presentará su informe el 15 de marzo.