vitoria – El mercado de agentes libres de la NBA se abrió oficialmente ayer a la medianoche hora española y, por lo tanto, las franquicias estadounidenses pueden empezar a negociar desde hoy mismo de manera oficial con aquellos jugadores sin contrato o, en su defecto, los que en su día no resultaron elegidos en el draft. Entre estos últimos se encuentra Rokas Giedraitis, cuya salida del Baskonia ha entrado definitivamente en su recta final.
La tardía finalización de la pelea por el anillo en la NBA por culpa de la pandemia ha postergado hasta el mes de agosto el cierre de movimientos que durante años precedentes siempre quedaban resueltos en julio. En el caso del alero lituano, el consabido interés que despierta al otro lado del charco le mantiene desde hace tiempo prácticamente con los dos pies fuera del Baskonia, que incluso se vio en la tesitura de tener que adentrarse en el mercado para atar cuanto antes un recambio de calidad (Simone Fontecchio) y planificar su proyecto de cara a la temporada 2021-22 sin la figura de Giedraitis.
La convivencia bajo el mismo techo del italiano y báltico constituye un sueño a todas luces irreal teniendo en cuenta que son dos pesos pesados para una misma demarcación a los que el Baskonia, ni posiblemente ningún otro club puntero de Europa, podría aspirar por razones deportivas y, sobre todo, económicas. Tras desestimar cantos de sirena en el pasado, Giedraitis considera que, cuando está a punto de cumplir las 29 primaveras, le ha llegado la hora de cruzar el charco. De hecho, así se lo expuso a la plana mayor azulgrana antes incluso del cierre de la pasada campaña, lo que activó la búsqueda de un sustituto por parte de la dirección deportiva.
Para hacer realidad el sueño americano, deben darse unos pasos que ya se han ido perfilando en las últimas semanas por parte de la agencia de representación de Giedraitis. El primero, y más importante, es que el lituano reciba una suculenta oferta que le permita costear su salida del Baskonia, con el que todavía le restan dos años de contrato. Al menos, un par de franquicias están dispuestas a poner encima de la mesa una oferta lo suficientemente atractiva que incluya dos o tres campañas garantizados.
Cualquier otro escenario no se entendería teniendo en cuenta su condición de uno de los mejores anotadores a este lado del Atlántico. Mediante la opción de un two way contract, por el cual un jugador puede prestar sus servicios tanto para un equipo de la NBA como para su conjunto filial de la Liga de Desarrollo, también existe algún viso de que la operación vea la luz.
Como es vox populi en este tipo de operaciones, las franquicias americanas pueden contribuir con un máximo de 750.000 dólares –unos 650.000 euros– a este tipo de operaciones. El resto de la cláusula estipulada en el contrato de Giedraitis deberá ser abonada por el propio jugador con el dinero que se garantice en Estados Unidos. Es decir, el báltico necesita un gran acuerdo, tanto en años como en dinero, para que le cuadren los números y la idea de cruzar el charco sea rentable.
Mientras Rokas ultima los últimos detalles, el Baskonia ejerce como sujeto pasivo y se remite al vínculo suscrito hace un año por el báltico hasta 2023 con sus correspondientes cláusulas de salida hacia la NBA. En cualquier caso, habrá que seguir armándose de paciencia algunos días más para asistir al adiós de uno de los jugadores más importantes de Ivanovic durante el pasado curso.
Y es que las franquicias de la NBA tan solo pueden empezar a suscribir y oficializar los acuerdos alcanzados con agentes libres a partir de este viernes. Por tanto, es posible que sea el fin de semana cuando quede vista para sentencia la marcha de Giedraitis, un tres con un perfil adecuado para el torneo norteamericano. Los aficionados del Baskonia, en cualquier caso, no deberán llorar en exceso su adiós ante la buena suma de dinero que dejará en las arcas del Buesa y la certeza de que Fontecchio no tiene nada que envidiarle tras lo visto este verano con su selección.
liga de verano
viejos conocidos en las vegas
Del 8 al 17 de agosto. El centro neurálgico del baloncesto americano durante los próximos días será el Thomas&Mack Center and Cox Pavilion del campus de la universidad de Nevada (Las Vegas). Dicho escenario será lo más parecido a un mercado persa con el inicio de la Liga de Verano, en la que multitud de jugadores tratan de encontrar un último resquicio con el fin de ganarse un contrato en la NBA ante la atenta mirada de multitud de agentes y directivos. Varios exbaskonistas han confirmado su presencia allí como Janis Timma (Orlando), Semah Christon (Denver) y Luca Vildoza (New York), sin obviar que Tiago Splitter será entrenador ayudante de los Nets.