El campo de fútbol de Orkoien honra ya a uno de sus más ilustres vecinos, Juan Carlos Unzué, exportero y exentrenador, que anunció el pasado año que padece esclerosis lateral amiotrófica (ELA), y en la pared que da acceso al recinto deportivo que lleva su nombre luce ya el grafiti obra de Koldo Calvo, artista de Barañáin.
"La vida merece la pena incluso cuando las cosas parece que se están derrumbando". Es una de las frases favoritas del exportero de Osasuna, Barça o Sevilla, que ilustra el mural junto a su rostro, mirando de frente, y su figura vestido con la indumentaria de portero en su etapa rojilla, al pie. Koldo Calvo Badiola, conocido en las redes como Koldo Graffiti, culminó el mural subido en un andamio de 7 metros de altura.
El pasado 18 de junio de 2020 Unzué anunció públicamente que se retiraba del fútbol profesional para dedicarse a su familia tras ser diagnosticado con "esclerosis lateral amiotrófica", una enfermedad neurodegenerativa que progresivamente provoca parálisis muscular y, de la cual, por el momento, no se conoce la cura.
Unzué, en una reciente entrevista, aseguraba que se sigue encontrando "tan fuerte o más que en ese momento. La enfermedad progresa lentamente, tengo dificultades en la movilidad pero utilizo mi silla de ruedas, que me ha dado la oportunidad de hacer cosas que antes no hacía".
"Me siento en la silla cuando noto deterioro físico, falta de estabilidad en las piernas... Con la pandemia todo se ha complicado y tenía excusas para no salir. Mi mujer es la que me dice que hay que salir un poco más. Lo primero que tienes que hacer es aprender a dejarte ayudar porque la enfermedad te obliga a ello. Lo que no hago es luchar con mi mente. Cuando no puedo hacer algo, levanto la mano y pido ayuda".