Daron Acemoglu, Simon Johnson y James Robinson han ganado el Premio Nobel de Economía por sus estudios sobre "cómo se forman las instituciones y cómo afectan a la prosperidad".
Según han destacado desde la institución, los galardonados han demostrado la importancia de las instituciones sociales para la prosperidad de un país y han ayudado a comprender por qué las sociedades con un Estado de Derecho deficiente e instituciones que explotan a la población no generan crecimiento ni cambios para mejor.
Acemoglu, Johnson y Robinson
En este sentido, los trabajos de Daron Acemoglu, Simon Johnson y James A. Robinson han demostrado que una de las explicaciones de las diferencias en la prosperidad de los países "son las instituciones sociales que se introdujeron durante la colonización", que para la Academia es una razón importante de por qué las antiguas colonias que una vez fueron ricas ahora son pobres, y viceversa.
A través de sus redes sociales, la organización ha ensalzado la labor de los tres premiados en la categoría de Ciencias Económicas por haber contribuido de manera significativa a comprender las diferencias de prosperidad entre las naciones.
Daron Acemoglu, Simon Johnson y James Robinson, destaca el jurado en su fallo, "han demostrado la importancia de las instituciones sociales para la prosperidad de un país. Las sociedades con un Estado de derecho deficiente e instituciones que explotan a la población no generan crecimiento ni cambios para mejor. La investigación de los galardonados nos ayuda a entender por qué".
Brecha de riqueza
En un apartado, en el perfil de la red social 'X' de los Nobel, la institución precisa que el 20% de los países más ricos del mundo tienen una riqueza 30 veces superior a la mayoría de los más pobres. Unos porcentajes que evidencian la brecha de ingresos entre los países más ricos y los más empobrecidos, pese a que estos últimos han visto mejorada su situación.
"Aunque los países más pobres se han vuelto más ricos, no están alcanzando a los más prósperos. ¿Por qué? Los galardonados en ciencias económicas de este año han encontrado pruebas nuevas y convincentes de una explicación de esta brecha persistente: las diferencias en las instituciones de una sociedad", señalan en dicho mensaje.
"El modelo de los galardonados para explicar las circunstancias en las que se forman y cambian las instituciones políticas tiene tres componentes. El primero reside en el conflicto sobre cómo se asignan los recursos y quién tiene el poder de decisión en una sociedad (la élite o las masas). El segundo guarda relación con que las masas a veces tienen la oportunidad de ejercer el poder movilizando y amenazando a la élite gobernante; el poder en una sociedad es, por tanto, más que el poder de la toma de decisiones. Por último, el tercer componente responde al problema del compromiso, lo que significa que la única alternativa para la élite es entregar el poder de decisión a la población", concluyen desde los Premios Nobel, en referencia a las investigaciones de los tres economistas.
Colonialismo
Daron Acemoglu, Simon Johnson y James Robinson, premiados con el Nobel de Economía 2024, han demostrado que una de las explicaciones de las diferencias en la prosperidad de los países son las instituciones sociales introducidas durante la colonización. Para Academia se trata de es una razón que da respuesta a por qué las antiguas colonias que una vez fueron ricas ahora son pobres, y viceversa.
"Algunos países quedan atrapados en una situación de instituciones extractivas y bajo crecimiento económico. La introducción de instituciones inclusivas crearía beneficios a largo plazo para todos, pero las instituciones extractivas proporcionan ganancias a corto plazo para las personas en el poder", añaden desde la organizados de los premios.
"Reducir las enormes diferencias de ingresos entre los países es uno de los mayores desafíos de nuestro tiempo. Los galardonados han demostrado la importancia de las instituciones sociales para lograrlo", ha terminado destacando Jakob Svensson, presidente del Comité del Premio de Ciencias Económicas.
El Nobel de Economía es posterior al legado de Alfred Nobel, ya que fue establecido en 1968 por el Riksbanken, el banco central sueco, coincidiendo con el 300 aniversario de la entidad. Concedido por primera vez en 1969, distinguió por primera vez al noruego Ragnar Frisch y al holandés Jan Tinbergen.
Además de suponer un gran prestigio a nivel mundial, el galardón está dotado con un importe de casi 970.000 euros.