A todo el mundo le sorprendió la inesperada salida de David Cantero de Mediaset hace un par de semanas. El veterano periodista, con una larga carrera presentando informativos en Telecinco (desde 2010), había sido reubicado en los fines de semana y llevaba unos pocos meses formando pareja en la mesa con María Casado, mostrando una enorme complicidad entre ellos y ofreciendo una cara más amable y simpática de lo que se suele ver en los informativos.
De hecho, la catalana la semana siguiente se despedía en antena de él entre lágrimas.
No se ha jubilado
De ahí que causara tanto impacto su marcha, ya que ni siquiera se despidió de una manera especial en su última aparición en un informativo que nadie sabía que era el último. Es como si todo se hubiera precipitado de repente. Ante tanto revuelo, Cantero, discreto siempre en su forma de actuar, se vio obligado a subir un vídeo a sus redes sociales. En primer lugar, para dejar claro que no se ha jubilado, que quiere seguir ejerciendo de periodista. Y además para asegurar que había sido una ruptura amistosa.
Aun así, todo sonaba muy extraño, faltaba algo por conocer, y el madrileño, de 64 años, se ha sincerado un poco más en el podcast Lo que tú digas, que conduce Álex Fidalgo. “Hubo un momento en el que lo vi venir, no hace mucho tiempo. No te puedo explicar los detalles de mi salida porque es muy complicado, pero digamos que la empresa está buscando abaratar costes”, explica Cantero. “A lo mejor una persona con mucha menos experiencia sale mucho más barata, más fácil y es más moldeable”, añade.
Situación incómoda
El periodista mantiene que en su salida no hubo malos rollos. “Sí digo que fue amistosa, porque lo ha sido. Pero notas que algo pasa, que algo hay. Sientes que hay quien quiere quitarte de en medio. Las empresas de televisión a veces entran en periodos de desconcierto, las direcciones cambian y hay gente a la que le gustas más o menos. Hubo un momento en el que dije: tú quieres que me vaya y yo casi que ya quiero irme”.
Cantero afirma que cuando le pasaron al fin de semana ya intuyó que algo no iba bien, pero aceptó el cambio con agrado e incluso terminó encantado. “Hasta el último momento yo he estado bien, apoyado por mi equipo y por la Dirección de informativos. Yo no tengo nada malo que decir de Mediaset, siempre se han portado bien conmigo desde que llegué hasta el último día”.
"Ha sido duro"
Eso sí, no se veía abandonando Telecinco ahora. “Para mí ha sido duro irme en un momento en el que no tenía pensado irme. Podría haber seguido unos años más en Mediaset, pero si íbamos a estar un poco incómodos, me voy y ya está”, afirma. Y no quiso llamar la atención en su salida. “Yo siempre procuro irme de los sitios bien, de forma discreta, calladito, yo no hago mucho jaleo”.
Una de las cosas que más le apena es que se haya roto la pareja televisiva que formaba con María Casado. “Isabel Jiménez y yo hacíamos una pareja televisiva excelente que jamás deberían haber roto y ahora María y yo teníamos un momento excelente como pareja televisiva que no deberían haber roto, ellos se lo pierden. Y en eso sí me da pena porque no hemos podido culminar nuestro segundo encuentro”, reflexiona y también bromea: “He dejado viuda a María”.