Navarra

De aquellos barros, nuevos proyectos e ilusión

Después de perderlo casi todo en las riadas de diciembre de 2021, tocados pero no hundidos, Biak Bat estrena local y nuevos proyectos.
Josu Méndez, Josune Azpiroz y Nerea Gilabert, en su nueva sede con los perros ‘Ivonne’ y ‘Lúa’ así como el gato ‘Txikilin’.

Hace poco más de un año, las riadas de diciembre de 2021 dejaron sin sede a Biak Bat, una asociación de Altsasu de intervenciones con animales. Era la tercera vez que su local del polígono Isasia se inundaba. Pero en aquella ocasión fue peor, con el agua a 1,80 metros de altura. “No nos habíamos recuperado de la pandemia y llegaron las inundaciones”, recuerda Josune Azpiroz, una psicóloga que junto a Josu Méndez, adiestrador canino, pusieron en marcha en 2011 con mucha ilusión un proyecto social innovador para atender a las necesidades psicosociales y educativas existentes en la zona. Doce años después Biak Bat ha dado empleo especializado a cinco mujeres, tres en la actualidad, convertida en referente en terapias a personas con autismo, discapacidad o con secuelas de hecho traumático, de forma individual o colectiva. Prueba de ello es que fue incluida en la lista de Forbes de las Otras 100 Mayores Fortunas de España.

Las inundaciones fueron al final del año que celebraban su décimo aniversario, un mes después de que fuera reconocido su trabajo con el Premio Sakana Saria por votación popular. Además de importantes daños materiales, el río Burunda se llevó buena parte de la ilusión, como confiesa esta psicóloga. Pero ganaron las ganas de salir adelante y con mucho trabajo, gracias a la ayuda de amigos y familiares, recuperaron todo lo salvable y se trasladaron a un local cedido por el Ayuntamiento de Altsasu en la planta baja de Intxostiapunta, habilitado como espacio provisional para el cetro 0-3 años. “Las inundaciones fueron el viernes y el lunes ya estábamos trabajando y pudimos continuar con la sesiones. Es de agradecer la pronta respuesta que nos dio el alcalde, facilitándonos esa opción”, señala esta pareja.

Allí estuvieron hasta el 31 de julio. “En mayo nos comunicaron que se iba a trasladar la ludoteca. Teníamos dos meses para buscar algo y no ha sido fácil”, observa. Así, encontraron un local en la parte este del antiguo centro parroquial Xabier, en la zona de Otai. “Lo hemos alquilado para cinco años. El centro se ha reformado en base al decreto foral que regula los centros ocupacionales, sobre todo en cuanto a accesibilidad, con baños adaptados. Tras el covid también contar con un sistema de ventilación. Todo ello ha exigido una inversión mayor, más de 60.000 euros”, apunta Josu Méndez. “No hemos contado con ningún apoyo económico. Al ser una obra de 2022, no hemos tenido subvenciones. Tampoco somos una entidad pública ni comunidad de propietarios”, observa.

Nerea Gilabert, Josune Azpiroz y Josu Méndez en el exterior de la nueva sede de Biak Bat. N.M.

No obstante, cuentan con una subvención de 36.000 euros, fruto de una enmienda conjunta de PSN, Geroa Bai, EH Bildu y Podemos a los Presupuestos Generales de Navarra, una vez suscriban con el Gobierno de Navarra un convenio para la intervención con personas con trastorno mental grave o riesgo de exclusión de la zona de Sakana, un recurso inexistente en la zona y que obliga a trasladarse a Pamplona. Asimismo, prevén firmar otro convenio con la Mancomundiad de Sakana para facilitar el acceso de la población a los servicios que ofrecen.

“La idea es que sea un centro integral de apoyo a las familias usuarias con necesidades especiales, desde atención temprana a personas adultas, con el fin de complementar el resto de recursos con intervenciones desde la perspectiva de animales y naturaleza”, observa Josune Azpiroz. Al respecto, destaca que con el nuevo local han mejorado en calidad en cuanto a las instalaciones, y también en una mayor oferta.

“Queremos ofrecer atención diurna, un centro ocupacional o de recursos con terapias con animales para edades comprendidas entre 0 y 16 años. También nos planteamos ofrecer a diferentes entidades de Navarra y País Vasco que no tienen sede en Altsasu la posibilidad de que puedan ofrecer sus servicios en nuestras instalaciones; un centro red para traer servicios al entorno rural y así atender los derechos de atención de las personas que viven en los pueblos. Vemos muchas necesidades que podemos cubrir”, señala Josune Azpiroz.

Y es que como el ave fénix que renació de sus cenizas, en su caso del barro, han crecido en la adversidad. “Estamos ultimando las obras y diferentes proyectos para empezar de nuevo con muchas ganas y nuevos proyectos”. Se prevé que las instalaciones se inauguren el 10 de marzo, a las 18.00 horas.

“El Gobierno de Navarra nos reconoce como una entidad de solvencia y sello de calidad. Los parlamentarios y parlamentarias saben de nuestro trabajo. Colaboramos en proyectos de investigación con la Universidad del País Vasco, con resultado científicos que avalan nuestro trabajo. Ya no somos esos locos de los perritos, somos unos profesionales con unos resultados avalados por investigaciones científicas y datos cuantitativos”, cuenta Josu Méndez. Pero todavía queda camino por recorrer. Y es que el sueño de esta pareja es crear un centro de intervenciones

24/02/2023