¿Debemos restringir ciertos alimentos de la dieta? Esto es lo que dice la nutricionista vasca Gabriela Uriarte

Actualizado hace 4 horas

La relación con la comida es un aspecto fundamental de la salud, pero también un terreno donde predominan normas estrictas y restricciones que, según la nutricionista vasca Gabriela Uriarte, pueden generar muchos más problemas de los que pensamos.

Conocida por su participación en el programa 'A Bocados' de ETB2, Uriarte ha revolucionado el enfoque de la nutrición al proponer una visión más flexible de la alimentación. Recientemente, a través de su cuenta de TikTok, ha compartido un mensaje contundente sobre la importancia de abandonar la restricción como herramienta de control alimentario.

La ilusión del autocontrol: el error de la restricción

En su vídeo, Uriarte plantea una pregunta clave: “¡Oye! Una duda, ¿qué tal te ha ido con eso de intentar restringirte un alimento con el que sientes descontrol?”. La nutricionista destaca que la reacción natural a la restricción no es el autocontrol, sino el descontrol. Es decir, cuando una persona decide eliminar de su dieta un alimento que le genera ansiedad, es común que termine consumiéndolo en exceso.

Este fenómeno, conocido como "el ciclo de la restricción y el atracón", es una reacción esperable del cuerpo y la mente. La percepción de prohibición crea un deseo mayor, lo que con frecuencia termina en un consumo compulsivo de ese alimento. “No es tu fuerza de voluntad la que falla”, enfatiza Uriarte, “sino la estrategia que estás utilizando”.

El problema de la norma alimentaria

Uno de los puntos centrales del mensaje de Uriarte es la necesidad de abandonar la "norma alimentaria" que impone reglas estrictas sobre lo que se puede o no se puede comer. Estas reglas generan una relación poco saludable con la comida y refuerzan la sensación de fracaso cuando se rompen.

La clave, según la experta, está en restaurar una relación natural con la alimentación, una que permita la libertad de elegir sin culpa ni ansiedad. En este sentido, la nutricionista compara el intento de "dejar el interruptor a medias" con la dificultad de lograr un equilibrio en la alimentación cuando se parte de la restricción.

Chica disfruta de una deliciosa pizza en un restaurante. Freepik

Pasos para una alimentación libre y equilibrada

Uriarte propone un enfoque en cuatro pasos para lograr una relación saludable con la comida y eliminar el descontrol alimentario:

1. Buscar apoyo profesional. Lo primero es acudir a un especialista en nutrición que ayude a trabajar sin dietas. Un profesional guiará el proceso para evitar caer en el ciclo de restricción y atracón.
2. Organizar una estructura alimentaria saludable. No se trata de restringir, sino de crear un sistema de alimentación suficiente, variado, nutritivo y placentero. Este paso es esencial después de años de dietas estrictas, ya que actúa como un soporte transitorio hacia una relación más natural con la comida.
3. Explorar las restricciones. Este punto es clave, pues es aquí donde suelen salir los problemas de fondo. Analizar las restricciones alimentarias permite comprender cómo han afectado la relación con la comida y trabajar para eliminarlas.
4. Avanzar hacia una alimentación intuitiva. El objetivo final es recuperar la capacidad de comer de forma natural, sin miedo ni culpa. Esto implica escuchar el propio cuerpo y responder a sus necesidades sin someterse a normas externas.

Chica desayuna un croissant acompañado de un café. Freepik

Un enfoque realista

La propuesta de Gabriela Uriarte se aleja de las dietas restrictivas tradicionales y apuesta por un modelo de alimentación intuitivo y flexible. Su mensaje resuena especialmente en una época en la que el bienestar emocional y mental está cobrando tanta relevancia como el físico.

El cambio de pensamiento que plantea Uriarte no solo busca mejorar la alimentación, sino también transformar la manera en que las personas se relacionan con la comida y consigo mismas. “Dejar de intentar controlar con restricción es el primer paso para tener una relación sana con la comida”, concluye la nutricionista.