Los aficionados de la Real Sociedad han pasado un férreo cacheo de seguridad, dentro de unas carpas, antes de acceder al Partizan Stadium, donde se ha jugado el partido ante el Maccabi Tel Aviv: "Nos han bajado hasta los pantalones antes de entrar al estadio", afirma un realzale.
Mala posición
También ha generado malestar el lugar donde se han ubicado los aficionados txuri-urdin ya que estaban lejos del terreno de juego, debido a la pista de atletismo que separa la tribuna con el verde, y detrás de una portería. El resto de estadio estaba prácticamente vacío. La asistencia registrada ha sido de 429 personas.
Los aficionados israelís en cambio, han ocupado la tribuna de los banquillos y uno de ellos ha insultado a los porteros de la Real cuando han salido a calentar.
Varios aficionados han entrado tarde al partido, debido a la seguridad extrema que ha habido en el acceso al estadio serbio. El presidente de la Real, Jokin Aperribay, ha esperado a que todos los aficionados accedan al recinto antes de entrar al estadio.