Derrota para el Amorebieta en un atropellado derbi

Casi tres meses después el Amorebieta recibió una derrota en un extraño partido ante un rival directo como es la Real Sociedad B. Un derbi euskaldun disputado en un terreno de juego que no estaba para contemplaciones y que propició una atropellada primera parte.

Empezó mal el choque para los de casa y acabó peor. En los primeros compases una entrega atrás de Sibo le jugó una mala pasada a Murua que se vio obligado a zancadillear a Magunazelaia que rápidamente corría en busca de Jonmi con el balón en sus pies. El árbitro no dudo. Roja directa. Los donostiarras tenían el camino allanado. Jorge Mier evitó la finalización de Maguna que de nuevo quería marcar el primero. Y lo hizo Kortajarena en una rápida jugada que condujo Ander Martín para con tranquilidad regalarle el gol al delantero donostiarra. Los balones largos ponían en serios apuros a la defensa vizcaína. Jonmi desde el suelo evitó el disparo mordido de Olasagasti. La Real B jugaba a placer y seguía insistiendo. Al palo remató Olasagasti. La primera local fue un cabezazo con peligro de Jauregi con peligro en una falta entre una nube de jugadores. La Real seguía percutiendo. Martón finalizó con fuerza pero arriba desde la derecha del ataque. Izeta también finalizó muy alto. Martón se plantó ante Jonmi y tras la salida del portero quedó trastabillado y a puerta vacía remató muy alto. El delantero protestó una posible falta y la expulsión del guardameta. A un minuto del final, llegó otra jugada decisiva. Rayco piso área sin balón y sin opción de ganarlo muy cerca del córner, la salida de Marrero acabó con el canario por los suelos y el árbitro consideró el derribo como penalti. Sin balón y absurdo, pero penalti. Jauregi hizo un inesperado empate desde los once metros.

En el arranque del segundo tiempo, el partido se tranquilizó. Jauregi puso a prueba a Marrero. La lluvia persistía y el campo cada vez presentaba peor aspecto. No se podía jugar por bajo. Jonmi atrapó un peligroso balón desde la izquierda de Ander Martín. Gorrotxategi puso a prueba los reflejos de Jonmi que voló junto al poste. A cinco minutos del final Gabilondo disparó con fuerza y el rechace de Jonmi lo tuvo muy cerca Teijeira. Otra vez que sacó su guante Jonmi en un disparo enroscado de Ander Martín que buscaba la escuadra. El gol visitante era de esperar. Teijeira porfió por la izquierda y sin ángulo a la segunda consiguió el segundo tanto. Una bofetada para el Amore que había aguantado estoicamente durante prácticamente todo el encuentro en inferioridad.