La Navidad es época de reencuentros, de comilonas y de intercambio de regalos. Las visitas de Olentzero, Papá Noel o los Reyes Magos están entre las más esperadas por estas fechas y sus protagonistas son siempre bien recibidos.
Mayores y pequeños esperamos con ilusión un pequeño detalle y deseamos que los nuestros sean del agrado de quien los recibe. Así, regalar es siempre una demostración de cariño y eso también se muestra en el envoltorio. Sin embargo, este no siempre es fácil de realizar y envolver un regalo a veces se convierte en un auténtico desafío.
Para regalos grandes y complicados
Ni todos los obsequios tienen formas rectas, ni todo el mundo tiene la misma destreza para envolver. El tamaño del papel a veces tampoco ayuda y es necesario tirar de ingenio, y de paciencia, para obtener como resultado unos paquetes atractivos a la vista.
Hay distintas formas de envolver regalos, pero en primer lugar nos vamos a referir a una que destaca por su sencillez y por ser rápida y económica; se trata de la envoltura diagonal. Resulta ideal para regalos grandes o de formas complicadas y además permite aprovechar mejor el papel.
En primer lugar, debes colocar el regalo en diagonal sobre el papel. Lleva una esquina de este sobre el regalo y fíjala. Haz lo mismo con las otras tres y por último dale la vuelta al paquete. ¡Ya lo tienes!
Otros trucos
Si a estas alturas de la Navidad todavía te quedan regalos por envolver y no sabes bien cómo hacerlo, hay otras formas bastante socorridas de realizarlo. Algunas de ellas son:
1- Envoltura clásica
Solo necesitas papel de regalo, tijeras y cinta adhesiva. En primer lugar, corta el papel dejando un margen para cubrir todo el regalo. Coloca el objeto en el centro del papel. Dobla los lados largos hacia el centro y pégalos con la cinta. Por último, dobla los extremos sobrantes en triángulos, luego súbelos y fíjalos con cinta.
2- Bolsita de papel
Resulta perfecta para envolver objetos pequeños y su elaboración es muy sencilla. Corta un rectángulo de papel, dóblalo por la mitad y pega los lados con cinta o pegamento, dejando uno de ellos abierto. Introduce el regalo y cierra doblando la parte superior como si fuera un sobre.
3- Con forma de caramelo
Es ideal para envolver regalos cilíndricos. Coloca el regalo en el centro del papel, envuélvelo con su forma y pégalo. Gira los extremos del papel y átalo con cintas o lazos.
4- Con una solapa decorativa
Si quieres darle al regalo un toque elegante, sigue el método clásico, pero dejando un lado más largo. Dobla este extremo en varias capas (como un acordeón) y fíjalo con cinta adhesiva o con pegamento.
5- Doble envoltura en cruz
Para obtener un efecto original, usa dos papeles de colores diferentes. Envuelve el regalo con un papel base de color liso. Después añade una franja de papel estampado alrededor del regalo como si fuera una cinta.
6- Sin cinta adhesiva (solo doblado)
Este método requiere un poco de precisión a la hora de hacer las dobleces. El papel que utilices debe ser más grande que el que necesitarías para envolver el regalo sin más. Dóblalo envolviendo el regalo y ajusta los extremos mediante pliegues precisos. Fija las dobleces con una tira de papel o con una cuerda.
Adornos con estilo
Si quieres elevar cualquiera de tus envoltorios y darles un toque más personal, puedes añadirles una decoración adicional, bien sean ramitas, hojas secas o flores, cintas, lazos o cuerdas de yute o pegatinas o etiquetas personalizadas. Le darán un estilo enorme a tus envoltorios.
Si estás por el reciclaje, puedes reutilizar papel de estraza que, pese a su apariencia sobria, puede quedar muy elegante si le añades algún tipo de adorno bonito, una dedicatoria, etc.
El papel de seda ya usado, si lo arrugas mucho, también queda muy bonito y da al envoltorio un aspecto muy vintage.
Otra opción es envolver el regalo con tela, utilizando vistosos retales de camisas viejas, vestidos, pañuelos, etc.
Todas ellas son opciones simples pero, con un toque creativo, puedes transformar cualquier envoltura en algo especial. ¡El truco muchas veces está en los detalles!