LA moda es la armadura para sobrevivir a la realidad del día a día", dijo Bill Cunningham, un célebre fotógrafo de moda de The New York Times, conocido por su fotografía callejera. Ayer hubiese disfrutado de lo lindo cuando el desfile estrella de la I Zazpi Kaleak Fashion Week cruzó la alfombra roja del teatro Arriaga y salió hasta la plaza para mezclarse con el pueblo. Una pantalla exterior lo transmitía todo mientras la influencer Esti Prieto y el actor Sergio Arrospide llevaban las riendas del desfile. En el vestíbulo del teatro más de cien invitados seguían en primera fila la ceremonia.
La I Zazpi Kaleak Fashion Week, una semana de la moda, la cultura y la gastronomía del Casco Viejo que se celebra estos días y ha nacido con vocación de continuidad tocó el cielo con los dedos en un desfile que mostró la moda y las tendencias del Casco Viejo en los diversos sectores –moda masculina y femenina, infantil, complementos, joyería, viajes, etc.–, representados por más de veinte firmas que asientan sus reales en el Casco Viejo.
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Ya desde sus primeros minutos lució como en una pasarela parisién: a lo grande y con un rocío de arte, fantasía y humor. Por ejemplo, cuando la presidenta de la Asociación Zazpi Kaleak, Rosa Pardo, invitó al alcalde Juan Mari Aburto a que "abriese el desfile" y éste calmó las aguas al advertir que "no se atrevía a tanto", que no iba a desfilar. Lo que sí hizo en su discurso fue elogiar el espectáculo de txalaparta –fue fabuloso y alcanzó su cenit cuando la bailarina Nerea Martínez interpretó un aurresku tocado al son de la madera y la piedra golpeados por Bittor Pastor y Ander Sánchez...– con el que arrancó la tarde y animar al comercio a que "trabaje en equipo y saque fuerzas de flaqueza", agradeciéndoles el desfile porque "Bilbao es un referente en el diseño". O cuando poco antes, al presentar a la propia Rosa, Sergio Arrospide aseguró que en su comercio La boutique de la media dan servicio a quien entre, "incluido un atracador de bancos".
Para entonces ya se habían encontrado en lo más alto de las escalinatas el propio Sergio y Esti Prieto, una influencer que supera los 350.000 seguidores. Bajaron las escaleras al compás, como los príncipes de un cuento de Hadas. Se había generado la expectación, mientras Susana Alaguero, Janire Torvisco y toda la gente que había arrimado el hombro en las entrecajas, cruzaba. "¡Olañeta!", gritaron los presentadores para darle paso al primer comercio. Y a partir de ahí fue un simparar por el que desfilaron, entre otros, modelos de la talla de Naia Olmo, María Ibarrondo, Edu Sierra, Mireia Martínez, Lander Gómez, Marta Rivas y Koke Quintana entre otros.
Hubo, ya les dije, cientos de testigos. Además de los ya citados estuvieron Javier Garcinuño, Daniel Solana, director de Basquetour, la diputada Lorea Bilbao, Juan Ignacio Malaina, en nombre del propio teatro; Joserra Taranco, de Laboral Kutxa; Jon Andoni Zarate, Amaia Arregi, Luis Arbiol, Joseba Rosales, Itziar Urtasun, Yolanda Díaz, Jon Bilbao, Nora Abete, Gabriel Rodrigo; el diseñador Peio Durán, Santiago Montaño, Carlos Monterrey, Cristina Motta, Rafael Gardeazabal, presidente de Bilbao Dendak; las actrices Maribel Salas y Sol Maguna; las influencers Nerea Zusberro, Leyre Quijada, Vanesa Mulas e Iran Rodríguez entre otras, gente de Cecobi como Pedro Campos, Laura Barturi y Jon Lasa, Julia Diéguez, Arantza Prieto, Nerea Zusberro, Eider Txarroalde, Eder Aurre, Beatriz Marcos, Jujo Ortiz, Carlos Román, la personal shopperMaría Uranga –que hoy realizará una jornada técnica anunciada comoModa-Gourmet junto al cocinero del restaurante Los Fueros–, Paúl Ibarra, Jon Bilbao y mucha otra gente ligada al mundo de la moda y al Bilbao vanguardista.