La Guardia Civil en colaboración con el Departamento de Salud del Gobierno Vasco, ha llevado a cabo la operación "BOTULI" con el objetivo de investigar un presunto delito contra la salud pública vinculado a la importación, distribución y administración ilícita de toxina botulínica (Botox).
Las investigaciones iniciales permitieron localizar una clínica clandestina en un piso de Bilbao, donde se ofertaban tratamientos de estética sin la autorización correspondiente del Gobierno Vasco.
Ante la existencia de indicios sólidos, el Juzgado de Guardia de Bilbao autorizó la entrada y registro en el inmueble.
Durante la inspección, los agentes hallaron diversos medicamentos sin control sanitario, instrumental médico, una camilla y otros elementos que confirmaban la actividad irregular del centro.
Asimismo, se encontraron sustancias estupefacientes, como anfetaminas destinadas al consumo de los moradores de la vivienda.
Como resultado de la operación, la titular de la clínica ilegal fue detenida y puesta a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia de Bilbao, que instruye el caso.