Si la situación en Bizkaia a primera hora de la mañana de hoy lunes no tenía nada que ver con la día de ayer, en la colindante provincia de Burgos todavía batallan al fuego con denuedo. Las llamas aún persisten y con el alba los servicios de Protección Civil de Burgos han activado recursos aéreos para ayudar a sofocar el fuego.
En concreto se han sumado esta mañana al operativo ocho helicópteros, dos aviones anfibios, otro de coordinación y un bombardero. Los helicópteros que se han visto volar en estas primeras horas de lunes por encima de Balmaseda para recoger agua de embalses cercanos. Unas aeronaves que ayer no pudieron volar debido a las fuertes rachas de viento y que hicieron muy difícil el trabajo durante toda la noche de bomberos profesionales y voluntarios de los parques de Miranda de Ebro, Medina de Pomar, Espinosa de los Monteros y el Valle de Mena. Esta mañana también ha sido enviados desde la Diputación de Bizkaia algunos retenes forales. Sobre la opción de que sean necesarios los recursos aéreos en la zona de Enkarterri, fuentes forales han indicado que no va a ser necesario a no ser que se reactive de forma importante el incendio forestal.
Desde Bizkaia
El fuego se extendió a última hora de la tarde de ayer en el valle de Mena burgalés desde Bizkaia arrastrado por el fuerte viento reinantes del sureste. Las llamas crecieron hasta el punto de que el operativo contra incendios activado por la Junta de Castilla y León fue insuficiente y tuvieron que solicitar ayuda a la Unidad Militar de Emergencia (UME) que llegó a la zona entrada ya la madrugada pasada. El medio centenar de efectivos trasladados desde León se han centrado en la defensa de la población de Antuñano, que junto con Bortedo tuvieron que ser evacuadas a primera hora de la noche de ayer. Cerca de cuarenta personas fueron sacadas de sus viviendas la mayoría segundas residencias.
El fuego en Burgos y la fórmula para extinguirlo ha sido causa de críticas políticas. La secretaria general del PSOE de Burgos, Esther Peña, ha lamentado el "raquítico" dispositivo contra incendios desplegado por la Junta de Castilla y León. Peña ha asegurado que se trata de un dispositivo "deficiente", a tenor de la virulencia con la que se propagaba el incendio declarado ayer en Enkarterri.
En este sentido, ha contrapuesto el trabajo realizado en la provincia con el que se mantiene en el País Vasco, donde se trabaja con medios propios "mientras la Junta clamaba por el despliegue de la Unidad Militar de Emergencia (UME)".
Para Esther Peña, la situación que se vive en estos momentos en el norte de Burgos pone de manifiesto "la incapacidad" de la Junta de Castilla y León en la lucha contra los incendios.