La Guardia Civil ha detenido al portero de la urbanización San Cosme de Valdemoro (Madrid), un hombre de 44 años, acusado de grabar a los vecinos, entre ellos a varios niños, mientras se aseaban o duchaban en los baños de sus viviendas.
Fue una vecina la que delató al portero cuando se percató de que había dejado un móvil grabando hacia su ducha. El teléfono estaba en el interior de una caja de herramientas con la que había acudido al domicilio para restaurar el suministro de agua caliente, según ha adelantado Telemadrid y han confirmado a EFE fuentes de la Comandancia de Madrid de la Guardia Civil.
Ese era precisamente su 'modus operandi' habitual. Supuestamente manipulaba las calderas con el objetivo de que los vecinos a los que pretendía grabar le avisaran para restaurar el suministro. Las víctimas solían percatarse de la falta de agua caliente al ducharse, por lo que el portero aprovechaba para grabarlas semidesnudas o desnudas.
El detenido, cuyo arresto se produjo el pasado día 1 de febrero, confesó que había grabado en esas circunstancias tanto a hombres y mujeres como a menores y que lo hizo para "consumo propio".
Tras pasar a disposición judicial, quedó en libertad, aunque se le impusieron medidas cautelares.
Los agentes le intervinieron varios dispositivos electrónicos, entre ellos cinco móviles y discos duros, que serán analizados en el marco de la investigación abierta para identificar a las víctimas.