La izquierda española se asoma al abismo por el cisma entre Yolanda Díaz y Podemos, que amenaza con que en las próximas generales haya dos listas diferentes a la izquierda del PSOE, la de Sumar y la de los morados, lo que llevaría a la izquierda a un escenario arriesgadísimo debido a la penalización de la división en el sistema de reparto de escaños en estos comicios.
Ambas partes tienen todavía margen para reconducir la situación de aquí a la convocatoria de elecciones pero las sensaciones son muy malas y lo que es ya un hecho es que Podemos no va a estar mañana en el lanzamiento de la candidatura de Díaz a la Presidencia del Gobierno español, lo que sienta un peligroso precedente en la relación.
Así, a unas horas de que la vicepresidenta segunda ponga en marcha su candidatura para presentarse a las generales con Sumar, se da por sentado que Podemos no aparecerá en la foto de mañana en Madrid. Y es que en el equipo de Díaz tienen claro que no van a ceder ante la exigencia de Podemos de cerrar un acuerdo bilateral sobre primarias abiertas.
A este respecto, la secretaria de Organización de Podemos, Lilith Verstrynge, insistió ayer en que “está en manos” de Díaz que ellos puedan acudir a arroparle en el lanzamiento de su candidatura, al explicar que la propuesta que han hecho “es de mínimos”, ya que de momento sólo quieren un compromiso para celebrar primarias abiertas y participativas.
Así las cosas, los morados se mantienen “a la espera” de una respuesta de la vicepresidenta. Y, mientras tanto, se van sumando adhesiones a a Sumar, incluso dentro de las filas moradas. Son varios los dirigentes territoriales que estarán arropando a Yolanda Díaz mañana –los de Nafarroa y Galicia, por ejemplo– y otros que, aunque no irán, han respaldado abiertamente su proyecto.
En este clima, hoy todos los dirigentes morados se verán las caras en el Consejo Ciudadano Estatal, máximo órgano de dirección de Podemos, donde, salvo sorpresa, se ratificará la ausencia de la oficialización de la candidatura de la vicepresidenta segunda del Gobierno.
Las dos partes han mantenido algún contacto esta semana, pero no se ha movido nada y lo que sigue sobre la mesa es la última oferta de Yolanda Díaz: un compromiso para elegir a los candidatos por primarias y dejar para más adelante la fórmula concreta, que se negociaría multilateralmente con el resto de formaciones, y no bilateralmente con los morados.
Todo este enfrentamiento preocupa especialmente en el PSOE, con un Pedro Sánchez temeroso de un hundimiento de sus socios de Gobierno que precipite una mayoría absoluta de PP y Vox tras los comicios de fin de año. Por ello, ayer voces socialistas como las de los ministros Pilar Llop y Félix Bolaños rogaron a Podemos y Díaz para que alcancen un acuerdo.
Euskadi y Nafarroa
Respecto a la CAV y Nafarroa, los posicionamientos de los líderes territoriales morados han sido distintos. Mientras que la coordinadora navarra, Begoña Alfaro, irá al acto de Sumar, la de Podemos Euskadi, Pilar Garrido, se escuda en problemas de agenda para no asistir, alegando que tiene el compromiso de asistir al derbi femenino de Real Sociedad-Athletic en Anoeta.