“La política va de hablar de la vida de la gente, y no de ruidos, de fuerzas ni de presiones”. Con solo una frase Yolanda Díaz volvió a sugerir mucho diciendo poco. Fue todo un mensaje a Unidas Podemos, que insiste en apremiarle para cerrar un acuerdo que deje a ambas partes satisfechas dentro de la confluencia con Sumar. Lo hizo además en un acto reseñable por su contenido y su continente, la presentación de un informe sobre el impacto de la precariedad laboral en la salud mental, en el que compartió escenario con Iñigo Errejón. Una imagen nada baladí. Evento al que, según denuncia la formación morada, no fueron invitados. Las conclusiones del mencionado estudio fueron uno de los compromisos acordados entre el Ejecutivo de coalición y Más País para el apoyo de la reforma laboral.
Más allá de la enjundia del asunto abordado, que la tiene y mucha, el trasfondo político llega en que esta parada en la agenda acontece en pleno proceso de reconfiguración de la izquierda más allá del PSOE, dado que la titular de Trabajo pronto celebrará un acto en Madrid para poner fin a la gira territorial de Sumar, donde se prevé que anuncie la decisión de su candidatura a las generales, y en medio de las tensiones con Podemos, que ha condicionado su presencia para arroparla en ese lanzamiento a cerrar antes un acuerdo bilateral para una coalición. La secretaria general de los morados y ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, insistió en afirmar que no hay novedades ni avances en esta posible alianza; y la secretaria de Organización de Podemos, Lilith Verstrynge, criticó que Díaz no les invitó a este evento, mientras que fuentes de su departamento precisaron que se ofreció a distintos grupos políticos asistir entre el público. Así, entre los presentes estaban los diputados autonómicos de Más Madrid Eduardo Fernández Rubiño y Javier Padilla, pero no representantes de la fuerza morada. “No hemos recibido una invitación concreta, pero imagino que habrá personas interesadas en el tema que asistirán”, respondió Verstrynge en RNE minutos antes de que se celebrara esta jornada. Podemos quiso aclarar que no le escuece la foto de la vicepresidenta con Errejón.
En el turno de agradecimientos, Díaz tuvo una mención expresa para Más País y su líder, aludiendo a su afán por llevar al debate público las cuestiones de la salud mental, pues es una de las claves de la tarea política, valoró la líder de la plataforma Sumar. “La política va de trabajar desde posiciones diferentes, pero siempre complementarias y sabiendo que tenemos un reto común, que es mejorar el país. Y yo quiero darte las gracias, en nombre propio y colectivo”, lanzó Díaz, sin aludir a otros partidos. Por su parte, Errejón también ensalzó la actitud de la vicepresidenta y de su Ministerio, al asegurar que da “gusto” trabajar con su departamento porque asume sus compromisos con “diligencia y entusiasmo”. En este sentido y tras pedir el avance de la renta básica universal en el futuro, reflexionó acerca de que hay que “dejar de hablar de los problemas políticos” y centrarse en los que padece la gente.
Salud mental
Errejón rememoró que se cumplen dos años desde que un diputado del PP le espetó en el Congreso vete al médico cuando intervenía para alertar de los problemas de salud mental, y que haber abierto este debate es una “victoria cultural”, dado que antes había formaciones que hacían “chascarrillos” y mofas y ahora se enganchan a este tema. Finalmente, defendió que hay que politizar estas materias que influyen en el día a día cotidiano de la gente para lograr una solución conjunta, dado que “no politizarlo es decir: jódete, lo sufres tú solo”.
De la negociación entre Díaz y Podemos dependerá en buena medida el resultado electoral de la izquierda.