Argentina ha estado en boca de todos, debido a la victoria de su selección en el Mundial de fútbol y a las multitudinarias celebraciones. Los argentinos de Urola Garaia también lo celebraron a lo grande. Para saber lo que ha supuesto esa victoria en Argentina y cómo lo ha vivido la colonia argentina de Urola Garaia, nadie mejor que Diego Cuartero. Este argentino lleva 15 años entre nosotros. Regenta la cafetería Txindoki y es socio del bar Urzubi.
Cuartero reconoce que ha sufrido mucho. “Perdimos el primer partido y si perdíamos otro nos íbamos a casa. El primero lo vi en el Urzubi. El segundo lo vi en casa, solo. Estaba muy nervioso y, si tenía que destrozar una tele, prefería que fuese la de casa. El tercer partido se jugó a las 18.30 horas. Pedí perdón a los clientes y cerré el Txindoki antes de lo habitual. El resto de los partidos los vi en el bar Izazpi, donde nos juntábamos los argentinos de la zona”.
La final fue apoteósica. “Nos juntamos unas 25-30 personas para comer. Después, vinieron más argentinos a ver el partido. Sufrimos mucho, pero disfrutamos aún más. Cuando finalizó el partido, celebramos la victoria en la calle. Los días siguientes, me felicitó mucha gente. Muchos querían que ganara Argentina, por los argentinos que vivimos aquí. Nos hemos sentido muy queridos. Y de las celebraciones de Argentina, qué decir... Salieron cinco millones de personas a la calle y, entre tanta gente, es normal que a alguien se le vaya la cabeza. Cada vez que veo las imágenes, me emociono. Fue una pena no poder estar allí”.
Pasión desatada
Los argentinos viven los partidos de su selección como nadie. “Cuando juega la selección, olvidamos todos los problemas. La propia vicepresidenta dijo que en noviembre y diciembre olvidarían la crisis, porque se disputaba el Mundial. Y así fue. Cuando juega Argentina, se paraliza todo: las clases comienzan más tarde para que los alumnos puedan ver los partidos, se vacían las calles... Pero lo de este año ha sido especial. ¿Por qué? Llevábamos mucho tiempo sin perder un partido, veníamos de ganar la Copa América, ha sido el último Mundial de Messi... La gente tenía una gran esperanza. Fueron muchos los argentinos que fueron a Catar y eso es muy caro para un argentino”.