El Teatro Arriaga de Bilbao rinde homenaje al creador donostiarra Pío Baroja representando La lucha por la vida’; una adaptación de casi tres horas de duración en el escenario dirigida e interpretada por Ramón Barea junto a los diez actores y actrices que dan vida al centenar de personajes que componen la obra. Ha sido una labor titánica, que comenzó resumida en más de 500 folios y que acabó condensada en torno al centenar, con 60 escenas distintas, que discurren a un ritmo cinematográfico trepidante. Una síntesis y una teatralización firmada por el dramaturgo José Ramón Fernández.
Con Ramón Barea como Baroja y con Arnartz Puertas como el joven protagonista Manuel Alcázar, el resto de los personajes están interpretados por Aitor Fernandino, Olatz Ganboa, Ione Irazabal, Itziar Lazkano, Sandra Martín, Alfonso Torregrosa, Leire Ormazabal y Diego Pérez.
Se trata de una coproducción del teatro Arriga con el Teatro Español de Madrid, y está previsto que la obra pueda realizar una gira a partir de otoño, ya en la próxima temporada. “Lo que da el carácter a un teatro son las producciones propias”, ha explicado Calixto Bieito, director artístico del Arriaga. “Con La lucha por la vida vamos a acabar con el gafe que había con Baroja en el Arriaga; hubo dos tentativas maravillosas por hacer La leyenda de Jaun de Alzate, una vez dirigida por Luis Iturri y otra, por Adolfo Marsillach, pero no se pudieron llevar a cabo. A principio pensamos en representar alguna obra de Pío Baroja pero Calixto (Bieito) nos propuso hacer algo muy difícil que era meterse en una de las trilogías muy queridas por e.l escritor, muy llena de personajes y posibilidades teatrales. Aceptamos el reto”, ha explicado Ramón Barea.
Baroja ofrece en esta trilogía el perfil de una época, con resonancias con la actualidad, donde se dibuja una sociedad decadente pero representada sin perder el humor. “El puñetero Baroja no nos deja que salgamos felices, sino reflexionando sobre esa sociedad y sobre esta sociedad actual en la que hay muchos elementos comunes”, continúa Barea.
La obra se estrena este viernes 17 de febrero y estará en cartelera hasta el día 26, periodo en el que se ofrecerán siete funciones.
Acción trepidante
La lucha por la vida es una trilogía de Pio Baroja (Donostia 1872-Madrid, 1956), uno de los grandes autores de la Generación del 98. Comenzó en 1903 como novela por entregas en el diario El globo, donde se publicaron hasta 59 capítulos, y entre 1904 y 1905 Baroja reescribió lo publicado y editó el conjunto en tres novelas: La busca, Mala hierba y Aurora roja.
El dramaturgo José Ramón Fernández, Premio Nacional de Literatura Dramática de 2011, ha realizado la adaptación teatral, partiendo de dos premisas: la primera, que pese a la reducción inevitable, se sienta que está todo. Y la segunda, que sea la obra; no su visión, sino la obra. Por lo tanto, es una adaptación fiel al autor y leal con la obra.
Ramón Barea, Premio Nacional de Teatro, asume el reto de dirigir el montaje teatral, a la vez que forma parte del reparto, interpretando y dando voz al escritor guipuzcoano. “Baroja solía hacer guiños en sus obras introduciendo su voz en ellas. Eso nos llevó a pensar que pudiera ser un personaje en esta producción, ironizando en algunas escenas, incluso se le hacen preguntas, que no contesta. Pero ayuda a organizar y a crear un elemento de distanciamiento, advirtiendo al espectador que no se confunda con los sentimientos del personaje, esto es teatro y tú eres el juez. Afortunadamente, me cambio muy poco de vestuario, con lo cual soy la envidia de los actores y actrices”.
El actor bilbaino ha apostado por una puesta en escena que va a lo esencial, a lo teatral y al espíritu de la historia barojiana. En concordancia, el escenario diseñado por Jose Ibarrola apuesta por el “menos es más” y por una escenografía práctica al servicio de los intérpretes; y el vestuario nos muestra a un elenco “en camiseta”, ataviado con un vestuario diseñado por Betitxe Saitua que es bastante híbrido pero puede evocar en cierto modo a los atuendos de principios del siglo XX. Además, el espectáculo contiene audiovisuales de Ibon Aguirre y destaca la música compuesta por Adrián García de los Ojos, que tiene un aire al romanticismo y al siglo XIX, con un leit motiv central que se repite a lo largo de la obra en distintos compases y estilos, y más música original de estilos como pasodobles, chotis, vals, habaneras o charangas.
Argumento
El hilo conductor es un personaje, Manuel Alcazar, un muchacho de un pueblo de Soria que va a Madrid, donde su madre sirve. Y allí, en aquel Madrid convulso, deslumbrante y antagónico de finales del siglo XIX empieza toda una aventura de vida. En un entorno marcado por la pobreza, principalmente en la periferia, con evidentes diferencias entre clases sociales, este joven, Manuel, trata de buscar referencias morales para vivir, pero en un medio hosco y adverso se debate desde el principio entre influencias contrarias, con personajes que lo incitan a construirse una vida honrada, laboriosa y digna, y otros que, por el contrario, constituyen una fuerza negativa y procuran su hundimiento moral.
Las entradas están ya la venta en el teatro Arriaga y en su web a un precio de 11 a 21 euros (con descuentos).