La Diputación foral de Gipuzkoa ha aprobado este viernes en Consejo de Gobierno extraordinario el proyecto de Norma foral de la reforma fiscal con el objetivo de "avanzar en la progresividad del sistema tributario, apuntalar la apuesta por la innovación y la competitividad y dar respuesta desde la fiscalidad, a los desafíos del Territorio".
En un comunicado, la diputada foral de Hacienda y Finanzas, Itziar Agirre, ha incidido en que "las medidas que aborda la reforma fiscal tienen como objetivo avanzar en la progresividad del sistema tributario, al mismo tiempo que buscan contribuir a dar respuesta desde la fiscalidad a los desafíos identificados en el seno de la ponencia de la reforma fiscal celebrada en las Juntas Generales de Gipuzkoa durante el primer semestre de 2024".
En esta línea el documento aprobado contempla diversas iniciativas fiscales en torno a la vivienda, la demografía, el nuevo modelo de cuidados, la sostenibilidad de las pensiones, la atracción de talento, la competitividad e innovación, la reducción de la desigualdad, la igualdad de género, la conciliación, la fiscalidad verde y el comercio local.
"Aspectos que fueron tratados por más de 60 expertos nacionales e internacionales y agentes locales conocedores de la idiosincrasia del territorio, quienes, con su conocimiento y experiencia han enriquecido el diseño de esta propuesta de reforma fiscal", ha señalado Agirre. Así, el texto aprobado incorpora algunos matices con respecto al inicial presentado el pasado 11 de noviembre tras el periodo de exposición pública y recogida de alegaciones de diversos agentes.
La diputada foral ha apuntado que "se trata de un proyecto sólido que busca contribuir a proteger nuestra economía y sociedad al mismo tiempo que dota de la seguridad jurídica y la estabilidad largo plazo necesaria para dar respuesta a los retos identificados".
"La Diputación cumple así con el compromiso adquirido con la ciudadanía de aprobar antes de finalizar el presente año el proyecto de Norma foral en su Consejo de Gobierno a fin de que este pueda ser discutido en las Juntas Generales de Gipuzkoa a partir de enero y someterlo a votación durante el primer trimestre del año 2025", ha incidido.
Además, ha recordado que este proyecto de Norma foral "se ha trabajado de manera armonizada con el resto de los territorios históricos de Euskadi". En cuanto al contenido de la reforma ha indicado que las medidas se distribuyen en cinco bloques: familia, igualdad, conciliación, mujer y juventud.
En el primero, "a fin de continuar promoviendo la cohesión social y reforzando la característica de la progresividad del sistema tributario vasco, la obligación de declarar en el IRPF se eleva hasta los 19.000 euros anuales (superior al Salario Mínimo Interprofesional que en 2024 se sitúa en 15.876 euros) mejorando así la tributación de las rentas más bajas", ha explicado.
El proyecto de norma foral recoge, además, según ha indicado Agirre, "iniciativas fiscales que promueven una igualdad real y efectiva que mejore la conciliación para garantizar un equilibrio justo entre las responsabilidades profesionales y las familiares".
También "se apuesta por la discriminación positiva de la mujer incrementando determinados porcentajes de deducciones y reducciones en aras de fomentar su participación en el tejido empresarial y económico, ejemplo de ello es la consolidación en el IRPF de la reducción del 15% (10 al 15%) para mujeres emprendedoras", ha señalado.
Asimismo, la diputada foral ha apuntado que "se busca dar visibilidad a las diferentes unidades convivenciales de nuestra sociedad y se introducen novedades en la configuración de la unidad familiar".
Para ello se plantean, por ejemplo, nuevas deducciones personales y familiares como la deducción por reincorporación al mercado laboral tras el cuidado de menores de tres años (excedencia/reducción jornada) de 1.200 euros para las mujeres y de 1.500 euros para los hombres, "discriminación positiva".
También se incluyen deducciones en el Impuesto sobre Sociedades a las empresas que implanten nuevas medidas de conciliación de la vida personal, familiar y laboral por encima de lo legalmente establecido.
Vivienda
En materia de vivienda, Agirre ha afirmado que "se favorece el impulso al arrendamiento potenciando los incentivos fiscales para incrementar la oferta de alquiler asequible", para lo cual se "mejora el tratamiento fiscal de la persona arrendadora en el caso de que la vivienda se destine a ser la habitual de la persona inquilina, estableciendo que será superior cuando exista intermediación pública en el alquiler o la vivienda esté situada en zonas tensionadas".
En el caso de los arrendatarios, "se aumenta el porcentaje de deducción aplicable para ciertos colectivos", y en el caso de las personas jóvenes "se incrementa hasta el 35%".
Agirre también ha subrayado que "se favorece la emancipación juvenil facilitando el acceso a la adquisición de vivienda habitual, con la ampliación del plazo de la cuenta vivienda de 6 a 10 años, suprimiendo, también el límite máximo de 8.500 euros de inversión por adquisición de vivienda durante el primer año, se incrementan las deducciones por alquiler y adquisición de vivienda habitual para el colectivo joven, cuyo umbral se eleva hasta que se cumplan los 36 años y se permite la aplicación de las deducciones generadas y no aplicadas en los siguientes cinco ejercicios".
Asimismo, y "con el objetivo de renovar el envejecido parque inmobiliario", se permitirá que la persona propietaria de una vivienda "pueda practicar la deducción por rehabilitación de vivienda protegida siempre que se destine a arrendamiento de vivienda habitual".
EPSV
Por otro lado, la diputada foral ha señalado que, "con el objetivo de avanzar en la complementariedad de la pensión publica", se fomentarán los sistemas de previsión social complementaria de empleo preferentes, "dotando para ello de un nuevo marco tributario que posibilite o ayude a conseguir dicho objetivo".
De esta forma, se actualiza su tratamiento fiscal "potenciando el cobro de prestaciones en forma de renta y se favorecen las aportaciones de calidad, con mayores incentivos a mayor aportación".
La reforma también contempla nuevas deducciones por obra de mejora de la eficiencia energética de las viviendas, tanto habitual como arrendada, para la reducción de la demanda de calefacción y refrigeración, la mejora en el consumo de energía primaria no renovable o la rehabilitación energética de edificios. También se proponen deducciones del 5% o del 10% en el IRPF por la compra de vehículos nuevos de cero emisiones y del 15% por el establecimiento de puntos de recarga.
Además, en el Impuesto de Sociedades se recogen deducciones por inversiones y gastos vinculados a proyectos que procuren el desarrollo sostenible, la conservación y mejora del medioambiente o la economía circular. También se aumenta las deducciones en I+D relacionadas con las nuevas fuentes de energía y se incluyen esos incentivos en la tributación local aumentando las actuales.
Agirre ha puntualizado que "en el caso de las microempresas la reforma fiscal consolida, en general, los forfaits (gastos de difícil justificación) ya existentes en las actividades agrícolas, ganaderas y en el transporte de mercancías y se establece uno nuevo del 40% para el régimen de artistas". Asimismo, se consolida el forfait para las microempresas en el 15%.
En el caso de las micros y pequeñas empresas se elimina el límite del 70% de la base imponible positiva previa para la compensación de las bases imponibles negativas. Finalmente, con el doble objetivo de favorecer el acceso a la vivienda y de proteger las cooperativas, se califican como especialmente protegidas las de viviendas en régimen de cesión de uso.