Urkullu cierra la emergencia sanitaria pero pide mantener las cautelas sanitarias básicas

El lehendakari Iñigo Urkullu ha anunciado este martes el levantamiento de la mayoría de las restricciones para contener la pandemia a partir del próximo jueves pero ha alertado de que no se puede dar por totalmente terminada la crisis sanitaria. Por ello, ha pedido a la ciudadanía mantener las cautelas sanitarias básicas.

Durante su comparecencia en Lehendakaritza, Urkullu ha destacado que "iniciamos una nueva etapa de vigilancia sanitaria" con el final de la situación de emergencia, que ha sido posible gracias al "sistema vasco de Salud y la mayoría de la población". "La respuesta vasca a la pandemia ha estado a la de los países más avanzados del mundo", ha recalcado.

Ha hecho hincapié además en la vacunación, "la mejor herramienta para doblegar al virus". Al respecto, Urkullu ha asegurado que Euskadi se ha situado "a la cabeza de la vacunación en el mundo".

Amenazas latentes

Urkullu ha destacado que el tratamiento de la situación puede abordarse en la actualidad "como endémica". En este sentido, ha explicado que el número de infecciones se vuelve relativamente constante a lo largo del tiempo, aunque puede haber "brotes ocasionales".

Los datos y la tendencia actual se corresponden con las previsiones establecidas en el Plan Bizi Berri IV, que prevé el levantamiento de las medidas limitativas de horarios, aforos y estructuración de las diferentes actividades. "Esto significa que puede ponerse fin a la Declaración de la situación de emergencia sanitaria. Significa, así mismo, que pueden anularse las principales medidas restrictivas o limitativas que estaban en vigor, aunque con el mantenimiento de cautelas preventivas básicas", ha remarcado.

En todo caso, ha reconocido que esta "indudable mejoría de la situación no disipa por completo las incertidumbres y amenazas latentes que se concentran en tres puntos: la imprevisibilidad del virus debido a su elevada capacidad de mutación, el déficit de vacunación en amplias áreas del planeta y la incertidumbre sobre la persistencia de la inmunidad natural o vacunal".

Por ello, ha subrayado que, en esta una nueva etapa de vigilancia sanitaria, se mantendrá una limitación del 80% de aforo en eventos que se desarrollen en espacios cerrados en recintos con capacidad superior a 5.000 personas.

De la misma forma, ha dicho que continuará en vigor la obligatoriedad de uso de mascarillas en interiores, y en exteriores cuando no pueda mantenerse la distancia interpersonal".

El lehendakari ha cerrado su comparecencia dando las gracias a todas las personas que han puesto su grano de arena para llegar a esta nueva etapa y ha precisado que es "es tiempo de esperanza".