Hay miles de formas de celebrar la Nochevieja y de recibir el nuevo año. Por lo general, es un día en que la gente se pone sus mejores galas y va a alguna sala de fiesta o cotillón para disfrutar entre amigos, pero en Pamplona prefieren estar en la calle y, sobre todo, disfrazarse.
Nadie sabe exactamente decir cuál es el origen de la peculiar tradición de disfrazarse. "Es algo relativamente reciente" contaba en Onda Vasca Nacho Calvo, Secretario General de la Asociación de Hostelería y Turismo de Navarra (AEHN), "yo creo que fue una cuadrilla farandulera que empezó con ello y se puso de moda, y como pasa con todo lo que impulsa la ciudadanía, se ha quedado".
Pero más que quedarse se ha convertido en todo un reclamo y cada vez son más las personas que escogen Pamplona como lugar en el que celebrar la Nochevieja y entre esos visitantes se encuentran muchos franceses. "El aumento es progresivo, lo vemos en las reservas de los hoteles que año tras año van en aumento, destacan sobre todo las personas del sur de Francia que se ven atraídas por el buen ambiente que tenemos en la calle".
El Secretario General de AEHN también ponía en valor la gastronomía "en Pamplona hemos aprendido mucho y conocemos bien el arte del buen comer así que a parte de la fiesta, los visitantes también encuentran un amplio abanico en oferta hostelera".