Esta tarde, desde las 18.30 horas, se van a ver las caras en El Sardinero el Deportivo Alavés y el Racing, pero también dos antiguos compañeros de clase. Cuando Luis García, tras pasar por la cantera del Atlético de Madrid, fichó por el Talavera y se dispuso a terminar COU –lo que hoy en día es bachillerato–, coincidió con un joven aficionado de dicho equipo que, pese a no jugar a fútbol, soñaba con ser entrenador. Algo muy complicado, según le explicó en su día el propio líder albiazul, pero que ha terminado consiguiendo.
A base de mucho trabajo y esfuerzo, aquel chico que se sentaba al lado del preparador babazorro en el instituto, Guillermo Fernández Romo, es a día de hoy el técnico del conjunto cántabro, lo que hace aún más especial si cabe el duelo entre albiazules y verdiblancos de hoy. Ahora bien, pese a que su relación, desvelada por el propio Luis García en su comparecencia previa al duelo, sea especial, el Glorioso visita el feudo cántabro dispuesto a dar continuidad a su buena racha de resultados.
Esa que, sin ir más lejos, le ha llevado de nuevo a la cima de Segunda División, donde se encuentra junto a la UD Las Palmas, y que también le ha hecho olvidar el varapalo sufrido ante el Burgos. Desde entonces, el Alavés ha sumado dos victorias y dos empates y, en la actualidad, la única preocupación de la afición está relacionada con la capacidad del equipo para generar ocasiones en ataque, pues, en las últimas jornadas, lo que parecía la principal virtud de los gasteiztarras se ha convertido casi en una debilidad.
Para solucionar esto último, Luis García necesita que sus hombres de ataque, muy bien protegidos por una defensa que ha mejorado notablemente con el paso de las semanas, den un paso al frente. En especial, eso hombres de banda, como Luis Rioja, Xeber Alkain, Abde o Jason, que son capaces de aportar verticalidad al grupo y, de esta manera, facilitar la tarea tanto a los delanteros como a los integrantes de la sala de máquinas, obligados demasiadas veces a mirar hacia atrás ante la ausencia de opciones de pase.
Respecto a la convocatoria albiazul, el técnico madrileño va a verse forzado a realizar cambios debido a la ausencia por sanción de Rubén Duarte, quien, en principio, debería ser reemplazado por Javi López; e, igualmente, por la necesidad de dar descanso a varios de los futbolistas que jugaron el sábado contra el Real Oviedo. Lo positivo, en este sentido, es que vuelve Carlos Benavídez a la lista y que también ha entrado en ella Víctor Laguardia, aunque, por el contrario, uno de los habituales, cuyo nombre se desconoce, podría causar baja.
El Racing de Santander, por su parte, llega a la decimocuarta jornada del campeonato liguero motivado por una muy buena dinámica de resultados. Pese a que arrancó el curso de la peor manera, con cuatro derrotas consecutivas, los verdiblancos solo han perdido uno de los últimos nueve partidos que han jugado; además, en siete de ellos han dejado la portería a cero, lo que, con un mejor inicio, les hubiera permitido estar peleando ahora por entrar en los puestos de promoción y no por alejarse de los de descenso.
No obstante, esto último no le sirve de consuelo a Romo cuando echa un vistazo a su enfermería. El entrenador racinguista tiene a sus tres delanteros (Credric, Gassama y Matheus) lesionados, por lo que deberá poner de nuevo a uno de sus extremos en la punta del ataque, y también al mediocentro Juergen y al lateral Mantilla. Asimismo, por si lo anterior no fuera suficiente, tampoco podrá estar presente en la visita del Alavés el mediapunta Jorge Pombo, expulsado en el reciente choque frente al Leganés.