Un hombre ha sido condenado a medio año de cárcel por hacerse pasar por un abogado de extranjería ante una inmigrante a la que estafó mil euros en Donostia, ofreciéndole "asistencia jurídica" y la "realización de las gestiones oportunas para regularizar su situación administrativa" en España.
Se da la circunstancia de que el procesado es reincidente, ya que el 14 de junio de 2019 fue condenado por un juzgado de Gandía (Valencia) por delitos de intrusismo y estafa, entre otros, a dos años y cuatro meses de prisión cuyo cumplimiento aún tiene pendiente.
Según la sentencia del caso, a la que ha tenido acceso EFE, los hechos sucedidos en la capital guipuzcoana tuvieron lugar entre julio de 2020 y octubre de 2021, cuando el procesado, "guiado por el ánimo de atribuirse falsamente la calidad de letrado", simuló ser abogado en Donostia "llevando tareas de asesoramiento jurídico" en materia de extranjería "sin estar debidamente colegiado".
De esta manera, "guiado por el ánimo de obtener un enriquecimiento injusto", entró en contacto con su víctima "ofreciéndole asistencia jurídica y la realización de gestiones oportunas para la regularización de su situación administrativa" en nuestro país.
Para ello, el hombre "se mostró" ante la damnificada como si fuera un "abogado ejerciente" que asumiría las tareas que se le encargaran "para la definición de la mejor estrategia jurídica a realizar" como "recopilar documentación, registrar altas y bajas de su situación laboral en el régimen de la seguridad social", entre otras, además de ofrecerle "asesoramiento" sobre distintos extremos.
Como compensación por sus servicios, el inculpado pidió a la mujer un total de mil euros que ella le abonó "en diferentes momentos", sin que el hombre nunca llegara a realizar "trámite alguno ante la administración pública dirigido a dar cumplimiento" a los servicios que le ofertó y sin devolver tampoco a la perjudicada el importe percibido.
Durante el juicio por estos hechos, el acusado reconoció los hechos y se conformó con la pena que solicitaba la Fiscalía, por lo que ahora ha sido condenado a medio año de cárcel y a abonar a la víctima la cantidad estafada como autor de un delito de intrusismo profesional en concurso medial con un delito de estafa con la agravante de reincidencia y la atenuante de reparación del daño causado.