Los sindicatos ELA, LAB, ESK, Steilas, EHNE e Hiru han exigido este jueves que se investigue de forma "exhaustiva" la muerte del empleado de un bar de Donostia la mañana del pasado domingo, al desatarse un incendio fortuito en el interior del local, sobre la que, según han informado, ha abierto un expediente Osalan.
Responsables de ELA y de LAB han hecho esta petición, en nombre de las citadas centrales, durante una concentración convocada por los seis sindicatos para protestar por la siniestralidad laboral, que se ha desarrollado este jueves ante el palacio Kursaal, en las inmediaciones del bar Gure Txoko en el que se produjo la muerte.
Los hechos ocurrieron en este establecimiento de la calle Usandizaga del barrio de Gros el domingo sobre las nueve de mañana, cuando los bomberos, alertados de un incendio en su interior, procedieron a sofocarlo, después de que el dueño acudiera a abrirles la puerta porque estaba cerrado.
Durante la extinción de las llamas, cuyo origen fue al parecer fortuito, según fuentes municipales, los bomberos hallaron dentro a un varón de 36 años, empleado del bar, en situación crítica, por lo que lo evacuaron al exterior, donde sanitarios de emergencias trataron de reanimarlo pero falleció.
El representante de ELA Andoni Larrarte ha trasladado su "apoyo y solidaridad" a los familiares y compañeros de trabajo del fallecido y ha exigido que se lleve a cabo "a la mayor brevedad una exhaustiva investigación para esclarecer lo ocurrido".
Ha denunciado "la grave siniestralidad laboral" que existe en Euskadi y Navarra, donde, según ha afirmado, "ya han muerto 53 personas en sus puestos de trabajo" en lo que va 2021, estadística en la que ha incluido al empleado del bar dado que el Instituto Vasco de Seguridad y Salud Laborales-Osalan les "ha comunicado" la apertura de "una investigación inicial" sobre este fallecimiento y, "hasta que no se demuestre lo contrario", así lo catalogan.
Larrarte ha culpado "a la patronal" del alto índice de accidentes de trabajo puesto que, en su opinión, "se vale de las reformas laborales que siguen en vigor para deteriorar las condiciones laborales y anteponer su beneficio económico a las condiciones de seguridad de las plantillas".
Ha criticado además "la pasividad de las instituciones públicas", entre las que ha citado al propio instituto Osalan y a la Inspección de Trabajo, porque, "en connivencia con la patronal, miran para otro lado y no asignan medios suficientes para controlar que las condiciones laborales sean dignas y seguras".
El responsable de LAB Iker Beristain por su lado ha insistido en reclamara que se investigue lo sucedido para saber "qué hacía" el empleado de 36 años a esas horas de la mañana en el interior del bar, "cuáles eran sus ritmos y cargas de trabajo".
"En esta Donostia que se está convirtiendo en una ciudad de turismo de élite, para el negocio de unas pocas personas", la precariedad, "sobre todo en la hostelería", es "alarmante", y sus trabajadores sufren "ritmos brutales y jornadas interminables", que no respetan la legislación laboral ni de prevención, mientras "las instituciones sistemáticamente miran para otro lado".
La treintena de representantes sindicales que se ha reunido junto al Kursaal ha permanecido en silencio durante media hora tras una pancarta con el lema "Lan istripu gehiagorik ez!. Prekarietatea hiltzailea (No más accidentes laborales. Precariedad asesina)".