Donostia tiene una población de 189.093 habitantes. Es el mayor número de empadronados en la capital guipuzcoana de la historia. Un dato que consolida la tendencia de crecimiento que Donostia lleva experimentando en los últimos años; una tendencia interrumpida solamente durante los dos años de pandemia. En 2023 la población donostiarra creció en 350 habitantes, un 0,18% más que el año anterior.
El censo de Donostia, a día 31 de diciembre de 2023, refleja que la mayoría de los habitantes de la ciudad son mujeres, el 52,7%, es decir, 99.657 vecinas frente a 89.436 hombres. Otro dato relevante es que viven más tiempo. La edad media de las mujeres donostiarras es 48 años y el de los hombres, 45. Por barrios, los más envejecidos son Gros (50 años de media), Centro (49 años) y Antiguo (49 años) y los que cuentan con población más joven son Loiola y Aiete, ambos con una media de edad de 43 años.
Amara Berri, el barrio más poblado
En este apartado no se producen cambios. Amara Berri continúa siendo el barrio más poblado de Donostia, con 39.192 habitantes, el 16% de la población donostiarra. Le sigue el Centro con 22.264 empadronados y Altza, con 20.484. Estos tres barrios, junto con Gros (17.943 vecinos) concentran el 48% del total de la población de la capital guipuzcoana.
En cuanto a los barrios que cuentan con menos vecinos, destaca Zubieta donde tan solo hay 314 personas empadronadas (0,2% de la población). Seguido de Igeldo (1.109 vecinos) y de Miramón-Zorroaga (2.431 habitantes).
El barrio que más ha crecido en 2023 ha sido Aiete, seguido de Intxaurrondo y Altza. Los que más población han perdido han sido Amara Berri, Gros y Antiguo.
Incremento de la población extranjera
La población extranjera, empadronada en Donostia en 2023, creció en 1.080 personas lo que supone un incremento del 5,92% respecto al año anterior. De esta forma, la capital guipuzcoana cuenta ya con 19.316 personas censadas procedentes de 135 países distintos. Así, la población extranjera representa el 10.2% del total de la población en Donostia.
Por país de procedencia, Honduras, Nicaragua y Colombia encabezan en ranking. De hecho, Colombia se afianza en la tercera posición después de que en el año 2022 desplazara a Marruecos a la cuarta posición. Estas cuatro nacionalidades, junto con la italiana, engloban el 44,7% de la población extranjera en Donostia.
El alcalde de Donostia, Eneko Goia, al dar cuenta de estos datos, destacaba además que "una cosa son las personas de nacionalidad extranjera empadronadas, pero otra cosa son las nacidas en el extranjero que tienen ya la nacionalidad. El número es mayor: 28.139 personas en Donostia". Asegura el alcalde que estos datos son los que permiten que la población de la capital guipuzcoana crezca ya que el saldo vegetativo es negativo: en 2023 hubo más fallecimientos (2.020) que nacimientos (1.079). "Si no fuera por los extranjeros tendríamos un decrecimiento de población, claramente, de alrededor de 1.000 personas al año. Y, sin embargo, las nuevas incorporaciones compensan y superan ese déficit que hemos tenido en el año 2023".
Concluye Eneko Goia que esto "está produciendo un cambio en nuestra ciudad que yo creo que es evidente: es una ciudad en la que cada vez somos más plurales, tenemos orígenes más diversos y existen más culturas que comparten convivencia".
Donostia, cada vez más envejecida
Con una edad media de 47 años, Donostia es una ciudad cada vez más envejecida. El 25,7% de los y las donostiarras tiene más de 65 años, el 7,8% es mayor de 80 años y hay 116 personas que superan, incluso, los 100 años. De hecho, a 31 de diciembre de 2023, había una persona censada en Donostia con 112 años, la persona de mayor edad de la ciudad.
Así, el índice de envejecimiento sigue subiendo y se sitúa ya en 210,5, lo que supone que en la ciudad hay 2,1 personas mayores de 65 años por cada menor de 12 años. Gros y Centro son los barrios más envejecidos.
En la otra cara de la moneda, la tasa de natalidad -aunque continúa siendo baja- ha subido un poco hasta el 5,69. Igeldo es el barrio que registró en 2023 una tasa de natalidad más alta, seguido de Añorga. Martutene fue el barrio con la tasa más baja de nacimientos.