Donostia: los solares de María Inmaculada y Hermano Gárate podrían acoger viviendas

Los terrenos del convento María Inmaculada, en la avenida de Ategorrieta, y de la residencia Hermano Gárate, en la falda de Ulia, con calificación terciaria que permitiría construir hoteles, podrían finalmente acoger también viviendas.

En los últimos tiempos, el Ayuntamiento de Donostia ha tratado de “persuadir” a los promotores de ambos solares para que desistan de de llevar a cabo sus proyectos con hoteles, a los que la Corporación donostiarra quiere poner un cierto coto. Para ello, ha iniciado los trámites para modificar el Plan General y decretar zonas saturadas de hoteles.

En los últimos meses, el Ayuntamiento descartó que el edificio de Telefónica, con fachadas a la calle Zabaleta y a paseo de Colón, se convirtiese en un hotel, como pretendían sus propietarios. Aunque la calificación del edificio era terciario, lo que permite un hotel, la del suelo es residencial, por lo que el Consistorio ha tenido un argumento legal para no dar el permiso. Considera que no hay “interés general en ello” y, por ello, finalmente, los dueños del edificio lo convertirán en viviendas.

Sin embargo, el Consistorio no siempre tiene argumentos sólidos para denegar permisos de hospedajes. Aunque en María Inmaculada hay un Estudio de Detalle que permite un hotel, la parcela destinada a residencia de estudiantes podría finalmente acoger viviendas.

En el caso de este terreno de Gros, donde se sitúa el convento de religiosas sin uso desde 2013, los promotores proyectaron crear un hotel, un edificio con supermercado y un centro de formación.

Sin embargo, al día siguiente de que la comisión de Urbanismo diese luz verde al plan, cambiaron el centro de formación profesional por una residencia de estudiantes, un tipo de equipamiento que se puede transformar en hotel no solo en verano sino a lo largo de todo el año.

El cambio de criterio provocó que el Ayuntamiento se sintiese engañado y que el departamento de Urbanismo paralizase la aprobación del Estudio de Detalle en mayo del pasado año. Sin embargo, finalmente, sin argumentos legales para sostener su posición, el Pleno aprobó el Estudio de Detalle en julio de 2021 con los votos de PNV, PSE y PP y el rechazo de EH Bildu y Elkarrekin Donostia.

A pesar de ello, Urbanismo siguió en conversaciones con los promotores y, a día de hoy, se prevé que la parte que querían destinar a residencia de estudiantes sea finalmente para viviendas. Ocuparán parte del patio de las monjas, en un terreno delimitado por la avenida de Ategorrieta, Marino Tabuyo y José María Soroa.

En el caso de la parcela libre de Hermano Gárate, detrás de la residencia de mayores San Ignacio y cerca del antiguo merendero Barbotegi, en la falda de Ulia, las conversaciones con dueños también persiguen que el solar acoja viviendas y no tipo de equipamiento.

En 2020, el Ayuntamiento de Donostia dio a conocer que había descartado el Plan Especial que había comenzado a tramitar para construir un hotel de 100 habitantes en este solar de Ulia. En este caso, fue la asociación de vecinos la que insistió repetidamente para que el destino del solar, inicialmente adquirido para ampliar la instalaciones destinadas a las personas mayores, se convirtiese en un hospedaje.

Apartamentos para mayores

La asociación de vecinos de Ulia aplaudió la decisión municipal y acusó a los promotores del proyecto de haber hecho trampas para lograr su objetivo. Señaló que el terreno había sido comprado en 1978 como espacio libre para anexionarlo al edificio residencial, ya que su construcción había producido un déficit de espacios verdes en la parcela.

Más tarde, el Ayuntamiento consideró adecuado crear apartamentos para mayores, ligados a la residencia Hermano Gárate, un proyecto que se fue trastocando para transformarse en otro para hotel.

El Ayuntamiento tiene en la actualidad otros proyectos de alojamiento sobre la mesa como, por ejemplo, uno para la parcela que se encuentra junto al edificio de información del Polígono 27 de Martutene, junto al renovado paseo.

La parcela de Mariaren Bihotza, en Sagüés, tiene también aprobado de modo definitivo su Plan Especial, que permite un hotel.