El riesgo amarillo por riesgo marítimo-costero no ha evitado que se registren graves imprudencias en nuestras playas. Según ha informado este miércoles el Ayuntamiento de Donostia, pasado el mediodía, una persona ha tenido que ser rescatada cuando se encontraba dándose un baño en la zona del Club Náutico de la capital. Además, dos ertzainas que se han lanzado al agua a socorrer a este imprudente también han tenido que ser rescatados por los bomberos.
Según han informado a este periódico fuentes del servicio de bomberos de la capital, al parecer, una persona que se encontraba en la zona del Club Naútico ha alertado de que un bañista llevaba tiempo tratando de salir del agua y pidiendo ayuda para hacerlo. Esta persona se habría metido en el agua por la zona del club deportivo Hegalak y, bien porque se lo ha llevado la corriente o bien porque se ha quedado frío, se ha encontrado en una situación en la que no podía salir. Testigos de lo que estaba ocurriendo, dos ertzainas han decidido lanzarse al mar. Sin embargo, la corriente en ese momento era muy fuerte y no han logrado rescatar al bañista imprudente, por lo que ha sido necesaria la intervención de los bomberos.
En la zona se ha desplegado un fuerte dispositivo y, finalmente, ayudados de motos de agua, los bomberos han conseguido rescatar a los tres, que han salido del agua con distintos grados de hipotermia, siendo más grave en el caso del bañista. Por el momento, se desconoce cómo evoluciona su estado.
El Ayuntamiento ya ha anunciado que va a analizar las circunstancias que han propiciado este rescate por si se tratara de una imprudencia, ya que la capital guipuzcoana está en aviso amarillo por riesgo marítimo costero. El rescatado podría tener que pagar los costes, ya que Donostia tiene aprobada una ordenanza fiscal que regula las tasas por los servicios de búsqueda, rescate y salvamento del Servicio de Prevención y Extinción de Incendios y Salvamento (bomberos) cuando se tienen que efectuar como consecuencia de actitudes negligentes. Se trata de una tasa que se aplica únicamente en aquellas situaciones derivadas de comportamientos imprudentes, no en "accidentes o rescates cuando se está llevando a cabo una actividad normal, no imprudente".