La Eskarabilera, símbolo de las fiestas de Basauri, llegó por los aires hasta Zestoa transportada por un globo el pasado 21 de octubre.
Jokin Artetxe la encontró en pleno monte y este sábado, 15 de febrero, se la entregará a la cuadrilla Aldatxa para que la lleve de vuelta a la localidad vizcaína, de donde partió la noche del 20 de octubre en el acto que pone fin a las fiestas patronales de la localidad vizcaína y que, al igual que sucede cada año, congregó a miles de basauritarras.
Jornada de caza
Cuando Jokin Artetxe salió de su domicilio en Zarautz con destino a su localidad natal, Zestoa, para disfrutar de una jornada de caza, poco podía imaginar qué sorpresa le iba a deparar el día.
Acompañado por sus tres perros, caminó durante varias horas por las estribaciones de Izarraitz a la caza de becadas, pero la suerte le resultó esquiva.
De vuelta al coche, su mirada se topó con algo que no cuadraba con el entorno de montaña en el que se encontraba: una cabeza gigante que le sonreía entre unos arbustos.
“Aquello no era normal. Cuando me acerqué, vi que lo que parecía ser un cabezudo. ¿Cómo había llegado hasta allí?, se preguntó Artetxe.
Nota explicativa y 150 euros
La respuesta la encontró en la propia figura. Una nota plastificada escrita en euskera, castellano y francés le servía de carta de presentación.
”Pone que es la Eskarabilera, una imagen que se lanza al cielo atada a un globo el última día de las fiestas de San Fausto en Basauri, y que el que la encuentre recibirá una bonificación de 150 euros si contacta con los teléfonos o el correo electrónico que aparecen en ella.”.
Sorprendido por el hallazgo, lo primero que hizo fue llamar a su cuñada, Ione, que, casualmente, vive en Basauri. ”Alucinó. Que yo hubiera encontrado la Eskarabilera que habían lanzado la noche anterior en Basauri le parecía increíble.”

Preparativo para el lanzamiento de la cabeza de la Eskarabilera el pasado 20 de octubre, con la colocacion del pañuelo de la cuadrilla Aldatxa, en la jornada final de las fiestas de San Fausto
Sorpresa en casa
Sabiendo ya lo que tenía entre manos, se dirigió al coche, no sin un cierto reparo al imaginar qué pensaría un montañero si se cruzara en su camino y le viera con una escopeta, tres perros y una cabeza gigante en los brazos.
La cara de sorpresa de su mujer, Estela, y de sus dos hijas, Nikole, de cuatro años, y Nora, de uno, al ver que había llegado a casa con una cabeza de gigante y no con becadas, como cabía prever, le confirmó que sus sospechas eran ciertas.
El momento de la despedida
El caso es que desde entonces, la figura de la Eskarabilera ha tenido una presencia destacada en casa de la familia Artetxe. Les ha acompañado en las celebraciones navideñas, y ha sido un motivo de juego para las dos niñas “aunque la verdad es que a la pequeña, Nora, le da un poco de respeto”.
Pero esa relación está a punto de finalizar. La cuadrilla Aldatxa, que fue la encargada de lanzar el globo con la Eskarabilera el pasado 20 de octubre, se desplaza el sábado a Zestoa para llevarla de vuelta a Basauri y entregar a Jokin Artetxe los 150 euros con los que se premia a quien la encuentra.

Cuadrilla veterana
Fundada en 1978, Aldatxa cuenta con 500 socios y movilizará a más de un centenar de personas para acudir a Zestoa y recoger a la Eskarabilera en un encuentro que va a tener lugar en la plaza de la localidad a las 12.00 del mediodía.
Niños, jóvenes, mayores, socios en activo y otros ya más veteranos se han sumado a esta excursión, al igual que representantes de la directiva de Herriko Taldeak, la entidad que agrupa a las cuadrillas que participan en las fiestas de Basauri.

Foto de grupo de los miembros de la cuadrilla Aldatxa acompañados por la Eskarabilera en las fiestas del año pasado
Zurrakapote
Otra presencia destacada en Zestoa el mediodía del sábado será la del zurrakapote, la bebida festiva por excelencia de los sanfaustos.
La cuadrilla Aldatxa se va a presentar en Zestoa con 30 litros de este combinado de vino acompañado de los más variados productos (melocotón, naranja, limón, azúcar, canela,...), dependiendo del gusto del que lo elabora. Tampoco faltarán los obligados porrones en los que se debe consumir, para que los zestoarras que se sumen al encuentro lo puedan catar como corresponde.
Símbolo y homenaje
La Eskarabilera es un símbolo arraigado en Basauri, que homenajea a las mujeres que recuperaban los restos de carbón desechados por los trenes de vapor y las empresas metalúrgicas para mejorar la economía familiar.
Su imagen se convirtió en el la seña de identidad de las fiestas de esta populosa población vizcaína en forma de una figura gigante que es custodiada por una cuadrilla cada año.
Además, una réplica de su cabeza, como la que encontró Artetxe, se lanza al cielo con un globo como simbólico cierre de los sanfaustos.

Representantes de las16 cuadrillas que se encargan da dar ambiente y color a las fiestas de Basauri
Un año muy especial
En 2024 esa responsabilidad recayó en Aldatxa. “Fuimos los primeros en la bajada de las cuadrillas y nos tocó llevar a la Eskarabilera a distintos actos de las fiestas. Fue muy especial, pero ahora ahora toca esperar otros 16 años para que nos vuelva a tocar el turno de disfrutar de las fiestas con la Eskarabilera”, manifestó Leire García Bernales, presidenta de la cuadrilla Aldatxa.

Miembros de la cuadrilla Aldatxa, acompañando a la figura de la Eskarabilera durante las fiestas del pasado año.
Sin tiempo de espera
Aldatxa lanzó también la Eskarabilera a los cielos la noche del 20 de octubre. La figura se perdió en la oscuridad ante la mirada de miles de basauritarras. y solo quedaba confiar en que pronto hubiera noticias de ella, algo que se produjo antes de lo esperado. “Cuando recibimos el aviso de que había aparecido un día después de lanzarla nos alegramos mucho; no siempre lo hace. Muchas de las cabezas han desaparecido sin rastro. Otras aparecen en zonas muy alejadas y algunas se encuentran años después.”
Periplos viajeros
Un ejemplo del carácter veleidoso de la Eskarabilera lo tenemos en la que lanzó la cuadrilla Ogeta Bat en 2018, localizada en Ibarrangelu en 2023, cinco años después.
En otras ocasiones ha hecho gala de un innegable don de la oportunidad. En 2018 se cumplía el 50 aniversario de los Sanfaustos y, ese año, aparecieron tres eskarabileras. La cabeza que lanzó Zoroak en 2014 se localizó en la comarca francesa de la Dordoña, la que lanzó Edurre en 2015 fue a caer en Las Landas, y la de Zigorrak del año 2017, en Normandía.
Vuelta a casa
Ese espíritu viajero ha tenido hitos señalados, como aquel lanzamiento de 1998 que terminó con a Eskarabilera en la República Checa. El año pasado, sin embargo, no quiso viajar tanto y, tras un vuelo de unos 70 kilómetros impulsado por los vientos, tomó tierra en Zestoa, poniendo fin a un viaje que hoy concluirá de manera definitiva con su vuelta a casa acompañado por la cuadrilla Aldatxa.