Dos exbaskonistas acaban de ser protagonistas en las últimas horas en el mercado, en concreto uno para recuperar su puesto de trabajo y otro para perderlo. Mientras Janis Timma ha sido oficializado como nuevo jugador del Unics Kazan de Velimir Perasovic para el próximo mes de competición, Khadeen Carrington se ha convertido en la víctima escogida por el Coosur Real Betis en busca de un revulsivo que mejore su delicado estado liguero.
Timma regresa al primer plano tras unas tristes últimas temporadas en las que ha sido más noticia por aspectos extradeportivos –está casado con la cantante y actriz ucraniana Anna Sedokova– que por su buen juego. Desde su marcha de Vitoria, la carrera de Timma se ha devaluado al máximo y no ha conseguido remontar el vuelo ni en el Olympiacos ni el Khimki. El Unics le ha reclutado por un único mes, aunque el contrato recoge la opción de ser extendido hasta el final de la temporada.
Por su parte, Carrington confiaba en ser un primer espada de un modesto de la Liga ACB como el Betis, pero sus números a las órdenes de Joan Plaza han sido decepcionantes consiguiendo tan solo 6,9 puntos de media en los diez partidos disputados. El combo trinitense no convenció a Ivanovic en la pretemporada y emigró de Vitoria sin jugar ningún encuentro oficial.