Solo echar un vistazo a la tabla clasificatoria del Campeonato de Parejas ya desvela la realidad: es un torneo de dos velocidades. Eso sí, la emoción no falta, pese a que la tabla esté rota. El equilibrio va por barrios.
DOS PARTES DIFERENCIADAS
Por un lado, en la cúspide, pugnan cuatro combinaciones empatadas con ocho puntos: Irribarria-Rezusta, Elezkano II-Zabaleta, Laso-Imaz y Altuna III-Martija. Entre ellas se disputarán los cuatro primeros puestos: las dos mejores tienen premio, pasar directas a semifinales; las otras quedarán penalizadas por el play-off.
Por el otro, Peña II-Albisu (cinco puntos), Urrutikoetxea-Aranguren (cuatro), Jaka-Mariezkurrena II (cuatro) y Ezkurdia-Tolosa (tres) debaten por la quinta y sexta posición. Los colistas aún no están descartados, aunque su situación es delicada. Todo puede pasar en las dos jornadas que restan por disputar. Toda la carne está en el asador.
FRACTURA DEL PAREJAS
La cuestión es la visible fractura del Parejas. Hace tres campañas, antes de que se integrara la eliminatoria previa a las semifinales en 2020, la liguilla de cuartos de final estaría vista para sentencia y apenas quedaría en juego la honrilla en los ocho envites que quedan por disputar.
La introducción del play-off por parte de la Liga de Empresas da vidilla a un epílogo que podía asimilarse como lánguido y que ahora asoma como el adalid de la emoción y la pimienta. Todo un acierto en ese sentido.
LA DUODÉCIMA JORNADA
Con todo, debido a su regularidad, las cuatro combinaciones de arriba parecen totalmente inabarcables. Más todavía después de los acontecimientos de la duodécima jornada, que finalizó el lunes en el Beotibar de Tolosa.
Se enfrentaron las dos velocidades con pleno para los duetos que comparten liderato. Elezkano II-Zabaleta, que tenían dudas, arrasaron con Peña II-Albisu (22-9) y Altuna III-Martija –ganaron a Urrutikoetxea-Aranguren 22-14 en Gernika–, Laso-Imaz –ganaron a Ezkurdia-Tolosa 18-22 en el Labrit– e Irribarria-Rezusta –ganaron a Jaka-Mariezkurrena II 10-22 en el Astelena– siguen en su línea.
EL LÍO DE ARRIBA
La igualada cuádruple, no obstante, quedará rota con el enfrentamiento directo entre los zurdos, campeones en 2017, y los únicos representantes de Baiko el domingo en el frontón Ereta de Tafalla. De hecho, Laso e Imaz tienen dos pruebas vitales, pues están citados también con Altuna III-Martija en la jornada 14. El partido está programado en Eibar el domingo 20 de febrero y cerrará la fase de cuartos de final.
Respecto al resto, Altuna III-Martija disponen de buena salud en caso de triples empates al final de la liguilla, pues entonces se tendrán en cuenta los duelos personales. Por el momento, únicamente han perdido un choque ante los rivales directos: el primero, ante Irribarria-Rezusta (11-22).
Los zurdos, por su parte, poseen una diferencia de tantos espeluznante en el global (+57) y, a falta del compromiso de Tafalla, tienen dos triunfos y tres derrotas. Elezkano II-Zabaleta han cerrado ya el periodo de enfrentamientos ante sus homólogos. Solo han ganado dos de las seis citas.
PELEA POR ENTRAR AL PLAY-OFF
La situación en la zona de abajo está algo más clara en uno de los casos: Peña II-Albisu se clasificarán si ganan uno de sus dos partidos. El problema es que se miden a Altuna III-Martija e Irribarria-Rezusta. Mal asunto. Actualmente, los demás duetos dependen de otros resultados. De hecho, los Jon Ander podrían meterse sin ganar, siempre y cuando Urrutikoetxea-Aranguren y Jaka-Mariezkurrena naufragasen en sus dos partidos.
Esa coyuntura auparía a Ezkurdia-Tolosa a la quinta posición. Los de Aspe tiene ganados los dos choques contra los finalistas de 2021 y debe enfrentarse a vida o muerte a las otras dos de Baiko. Cualquier traspié significa decir adiós al Parejas. El choque ante Erik y Jon del sábado en Iruñea se antoja fundamental para el devenir de la competición.
El nudo gordiano del Parejas está enredado. El puzle se desentraña en dos semanas de pura tensión. Todo por decidir.