Causar el mayor daño y destrucción posible. Este es el objetivo con el que Rusia está empleando los llamado 'drones kamikaze' contra Ucrania. El Ejercito de Putin ha bombardeado en los últimos días objetivos concretos en varias ciudades ucranianas, entre ellas la capital Kiev, empleando estos drones fabricados presuntamente en Irán.
Pese a que el presidente ruso la semana pasada aseguró en un discurso televisado que ya no serían necesario nuevos ataques masivos contra la población ucrania, tras las represalias lanzadas por la destrucción del puente de Crimea, los ataques no han cesado por parte de las tropas rusas.
El arma estrella ahora de Putin son los 'drones kamikaze', que han golpeado edificios residenciales en Kiev y otras infraestructuras críticas con el objetivo de dejar sin energía a la población ante la llegada del invierno. "Todas las noches y todas las mañanas el enemigo aterroriza a la población. Los drones suicidas y misiles atacan toda Ucrania. El enemigo puede atacar nuestras ciudades, pero no podrá doblegarnos", dijo en Telegram el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.
¿Qué son estos drones?
Aunque se mantiene en absoluto secreto, se sospecha que Rusia está empleando un tipo de 'dron kamikaze' muy preciso llamado Shahed-136 ('shahed' significa 'martir' o 'testigo' en árabe), pero los rusos los han renombrado como Geran-2.
Tienen forma de ala delta, miden casi cuatro metros y pesan 200 kilos. Disponen de GPS y montan un motor que les permite alcanzar un objetivo situado hasta a 2.500 kilómetros de distancia volando a una velocidad de 180 kilómetros por hora.
Se lanzan en oleadas de cinco en cinco. Una vez en el aire, sobrevuelan el la zona de guerra en busca de objetivos, por lo que se les incluye en el grupo de la denominada “munición merodeadora”.
Una vez localizado el objetivo, se lanzan sobre él en picado, como un kamikaze. Su capacidad de destrucción es muy elevada y algunos modelos pueden incluso destruir blindados. Tienen un margen de error de 800 metros.
Al ser controlados de forma remota, no infligen daño a los que los operan. Sin embargo, emiten un ruido ensordecedor, similar al motor de una motocicleta, que alerta a las defensas antiaéreas. Gracias a este zumbido pueden ser detectados a lo lejos y ser derribados con un lanzacohetes.
¿Y por qué Rusia está usando este armamento ahora? La inteligencia ucraniana sospecha que por el precio. Resultan mucho más baratos que los misiles de crucero que venía usando el Ejercito ruso. Aunque no hay cifras oficiales, fabricar un 'dron kamikaze' ascendería a los 20.000 euros frente a los cuatro millones de un misil balístico.