El Deportivo Alavés ya está en marcha tras los fastos del ascenso y el merecido disfrute vacacional. Ha dado comienzo una primera fase de intenso trabajo para llegar en la forma más óptima posible al lunes 14 de agosto, cuando a las 19.30 horas eche a rodar el balón en serio en este esperado regreso a la élite. Será en el Nuevo Mirandilla y ante el Cádiz, un rival directo de saque. La 'Green Capital' destila ilusión por cada esquina y no estaría mal arrancar de la mejor manera.
Durante estos siete días no habrá descanso, toca recuperar el terreno que otros han aprovechado y que la plantilla que continúa dirigiendo Luis García Plaza no por acabar mucho más tarde el pasado curso. Habrá sesiones en la Ciudad Deportiva José Luis Compañón por la mañana a partir de las diez, y lunes, miércoles y jueves también por la tarde, a excepción del sábado, cuando a las siete llegue la primera cita de pretemporada. Será en los alrededores de Santander, en el campo El Pilar de la localidad de Guarnizo ante el Racing, que este sábado pasado empataba sin goles ante el Burgos en Villarcayo.
Rubén Duarte destaca que ha sido "un verano corto pero inmensamente feliz por lo que logramos en Valencia, y también muy feliz por seguir tres años más, ambas partes nos pusimos de acuerdo sin ningún tipo de problema, y por ser el primer capitán del equipo. Soy el que ha jugado más partidos y eso conlleva ayudar a todos los chavales. Llevamos semana y media de retraso pero la ilusión y las ganas están intactas, porque volvemos donde el club siempre merece estar, que es la primera división".
Tras el punto final como jugador babazorro de Víctor Laguardia, el lateral zurdo representa un claro ejemplo del alavesismo más moderno, habiéndole tocado vestido de corto todo lo bueno y también lo malo, de lo último vivido futbolísticamente en Gasteiz. Se ha convertido ya, con 27 años, en el portador del brazalete que ostenta la capitanía de un vestuario al que pertenece desde que arribara en 2017 procedente del Espanyol. Más de un centenar de encuentros defendiendo la elástica albiazul le han llevado a adquirir esta nueva responsabilidad que para el almeriense es motivo de orgullo al coger el relevo de su ya excompañero. "Mucho. Se me ponen los pelos de punta. Desde que llegué siempre ha sido un referente nos ha ayudado todos los años que ha estado en el verde. Toda una leyenda para el club y seguro que estará para lo que necesitemos" el defensor maño, por el que Duarte siente "mucho respeto".