Apenas unas horas después de haber finalizado de manera oficial la temporada 2020-21 con la eliminación de la Liga ACB en Valencia, el Baskonia ha realizado el primer movimiento para ensamblar su proyecto de cara al próximo curso con la renovación de Dusko Ivanovic. Era algo esperado teniendo en cuenta el arraigo, el carisma y la valía de un entrenador con el que la entidad del Buesa Arena ha alcanzado los mayores éxitos de su historia.
El montenegrino, de 63 años, arrancará su duodécima temporada en el Buesa Arena con el reto de que el equipo siga siendo igual de competitivo que a lo largo del último año y medio, justo desde que se produjo su último regreso a la capital alavesa tras rescindir el contrato que le ligaba al Besiktas turco. Allí sufría problemas de cobro y la llamada de Querejeta sirvió para que devolviera la identidad a un grupo hundido anímicamente bajo la batuta de Velimir Perasovic.
El exitoso matrimonio formado por el Baskonia e Ivanovic se extiende de esta manera todavía más en el tiempo. Una dupla que se conformó por primera vez en el verano de 2000 tras su incorporación procedente del Limoges y que ha vivido tres etapas diferentes plagadas de éxitos (2000-05; 2008-2012 y 2019 hasta la actualidad).
En el palmarés del balcánico al frente de la entidad alavesa figuran 3 Ligas ACB, 3 Copas del Rey y una Supercopa, además de las dos finales de la Euroliga ante el Kinder y el Maccabi en 2001 y 2005, respectivamente.
Desde las altas esferas azulgranas no ha vuelto a existir la más mínima duda acerca de la idoneidad de que Ivanovic continúe pilotando una campaña más la nave baskonista, mucho más en un contexto de limitaciones económicas como el actual por culpa de la pandemia. Nadie mejor que él para dirigir con puño de hierro una plantilla en la que, una vez más, se registrarán numerosos cambios.
El de Bijelo Polje ya desplazó en su día a Pepe Laso como el preparador más longevo de la historia del Baskonia. Al margen de sus buenos resultados, siempre es una garantía por su profesionalidad, su rectitud y la exigencia a la que somete a sus jugadores, muchos de los cuales han crecido de forma exponencial y se han hecho de oro tras haberse puesto a sus órdenes.
Dusko trabaja con lo que tiene y siempre rehúye las excusas, virtudes que desde un primer momento calaron hondo en Querejeta. El presidente ha vuelto a concederle las llaves del equipo a un entrenador con una trayectoria jalonada de más luces que sombras. En sus once campañas en Vitoria, Ivanovic ha dirigido la friolera de 689 partidos entre Liga ACB y Euroliga con 455 victorias en su casillero, en concreto un 66,04%.