Un destello, fugaz pero efectivo de Cody Gakpo a los cinco minutos de partido permitió a Países Bajos salir airoso de un encuentro en el que su fútbol dejó mucho que desear contra Ecuador, que mereció más a los puntos. Uno por barba, sin embargo, se repartieron europeos y suramericanos en un envite que permite a ambos depender de sí mismos en la tercera y última jornada en el Grupo A, en el que el combinado de Louis Van Gaal terminará como primero de grupo si repite o mejora frente a Catar el resultado que firme ante la todavía viva Senegal la escuadra ecuatoriana, a la que le valdrá el empate contra los africanos y que buscó la victoria sin éxito ante una naranja mecánica que solo conserva el color de su indumentaria de tan icónico apodo.
En su segunda aparición en el campeonato tras vencer sin brillo alguno a Senegal en su debut, Países Bajos vivió durante más de 85 minutos del inapelable zurdazo que conectó el mencionado Gakpo para firmar así el gol más tempranero del Mundial. Convertido en el segundo neerlandés en ver portería en sus dos primeras citas mundialistas después de que Memphis Depay lo consiguiera también en la edición de 2014, la estrella emergente del PSV Eindhoven, autor de 9 goles y 12 asistencias esta temporada en la Eridivisie, marcó las diferencias en una primera mitad en la que apenas hubo fútbol. Y el poco que hubo lo puso, contra pronóstico, el combinado ecuatoriano, todo pundonor frente a una ‘naranja mecánica’ que deberá mejorar considerablemente si quiere optar al trofeo que tanto se le resiste. A pesar de contar con futbolistas de contrastadas condiciones técnicas, no va sobrada de alegría en su juego la selección dirigida por el experimentado Louis Van Gaal, que se limitó a nadar y guardar la ropa hasta el descanso ante la pujanza sin éxito de Ecuador.
El choque, no en vano, alcanzó el descanso con 1-0 en el marcador después de que Pervis Estupiñán, al filo del descanso, viera cómo se le anulaba el tanto del empate por el fuera de juego posicional de un compañero. Antes, a la media hora, había avisado con un potente disparo desde la lejanía Enner Valencia, uno de los nombres propios del torneo. No cantó bingo a la primera, pero no perdonó a la segunda el veterano delantero del Fenerbahçe, que devolvió las tablas al marcador a los cuatro minutos de la reanudación tras valerse de un rechace del cancerbero Andries Noppert a remate de Estupiñán. Un error en la salida del balón de Países Bajos hizo justicia a lo observado hasta entonces sobre el verde y remarcó, aún más, el papel de Valencia en su selección, pues el ariete, que tuvo que abandonar el terreno de juego en camilla en el minuto 89 por una lesión que amenaza su continuidad en el campeonato, suma seis dianas en cinco partidos en la Copa del Mundo siendo, además, uno de los cuatro únicos futbolistas que han marcado seis goles seguidos de sus países en los Mundiales junto con el portugués Eusebio, el italiano Paolo Rossi y el ruso Oleg Salenko.
AMBICIÓN SIN PREMIO
En lo colectivo, tras el 1-1, Ecuador tiró de ambición y se lanzó en busca de un segundo tanto que a punto estuvo de lograr por mediación del extremo Gonzalo Plata, cuyo latigazo, inmediatamente posterior a un nuevo intento del omnipresente Valencia, escupió el travesaño para alivio del conjunto neerlandés, que llegó a tambalearse ante la intensidad de un combativo y decidido oponente que le tuvo el respeto justo y necesario.
La ‘Tri’, en su cuarta aparición en un Mundial, pretende soñar en grande y demostró frente a Países Bajos tener la personalidad suficiente para mirar de tú a tú a cualquiera. Incluida a una selección con más nombre que fútbol a día de hoy y que, con el barcelonista Frenkie de Jong desapercibido sobre el tapete del Khalifa International Stadium, terminó prácticamente pidiendo la hora sin ser capaz de poner en ningún apuro a Ecuador, rival que asoma 36 posiciones por debajo en el ranking FIFA, pero que mandó en un envite cuyo desenlace, eso sí, deja a Países Bajos con todo de cara para finalizar el Grupo A como líder de un grupo sin una gran exigencia sobre el papel. Las sensaciones, con todo, no hablan bien de un combinado del que se esperaba más en cuanto a propuesta futbolística y que apenas ha cumplido el expediente en sus dos primeras actuaciones en el Mundial.
Ecuador, con la alarmante duda de Valencia, deberá por su parte certificar sus buenas prestaciones frente a Senegal después de frenar, en un choque en el que mereció más, a la naranja menos mecánica.