Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) y la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA) han recomendado este martes suspender la administración de la vacuna Janssen, de Johnson & Johnson, ante la posibilidad de que provoque trombos y como medida de "enorme precaución".
"La seguridad de la vacuna es la prioridad fundamental para el Gobierno federal, y nos tomamos cualquier indicio sobre problemas sanitarios muy en serio", ha indicado la FDA en un comunicado al que ha tenido acceso la cadena de televisión CNN.
La decisión ha tenido lugar después de que el diario 'The New York Times' informara de que seis personas que habían sido vacunadas con estos viales sufrieron una serie de trombos en las dos semanas posteriores a la vacunación, de las cuales una de ellas falleció. Está previsto que los viales de Janssen, que se administran de una sola vez, aterricen esta semana en el Estado para vacunar al grupo de personas comprendidas entre los 70 y 79 años.
Estos seis casos, sin embargo, constituyen un bajo porcentaje frente a las más de 6,8 millones de dosis de la citada farmacéutica que han sido administradas en todo el país. En todos los casos se trata de mujeres de edades comprendidas entre los 18 y 48 años, y todas ellas presentaron síntomas entre seis y trece días después de la vacunación.
Así, las autoridades han convocado una serie de reuniones para analizar en profundidad los casos y su "potencial importancia", tal y como recoge el texto. "La FDA revisará los análisis e investigará los casos. Hasta que el proceso se complete se recomienda suspender la administración", ha subrayado.