Polideportivo

Egan Bernal se ilumina tres años después

Tras sufrir en 2022 un brutal accidente que le alejó de la estrella que fue, campeón del Tour y del Giro, el colombiano regresa a la victoria con el doblete en los nacionales de su país
Bernal celebra la victoria en la prueba de ruta. / Federación Colombiana de Ciclismo / Efe

"El hombre no está hecho para ser derrotado, un hombre puede ser destruido, pero nunca derrotado”, dejó escrito Ernest Hemingway. Ese pensamiento que se adentra en lo desconocido, en los recovecos del ser humano, sirve para enmarcar la figura de Egan Bernal, campeón del Tour de 2019 y vencedor del Giro de 2021. El hombre llamado a tomar el relevo de Chris Froome, el monarca que reinó cuatro veces en Francia (2013, 2015, 2016 y 2017).

Al británico se le despedazó el sueño del quinto Tour tras un espeluznante accidente en el reconocimiento de la crono del Dauphiné de 2019. Desde entonces, el declive del ciclista, en el ocaso de su biografía deportiva, fue notorio y doloroso.

Bernal, que venció el Tour con apena 22 años, era la estrella emergente, que se apagó en una colisión brutal mientras entrenaba en Colombia. El puzle de Bernal saltó por los aires un lunes maldito: el 24 de enero de 2022.

Su cuerpo se estrelló contra la parte trasera de un autobús. Metida la cabeza sobre el manillar de la bici de contrarreloj, con la que entrenaba, Bernal no vio el autobús estacionado. Impactó a más de 60 kilómetros por hora. Abolló la carrocería del bus por lo brutal del golpe.

Una veintena de fracturas

Se astilló del todo el colombiano. El tremendo accidente le quebró de arriba a abajo. Su parte de lesiones era la cartografía del dolor. Se fracturó 11 costillas, el fémur, la rótula, las cervicales T5 y T6. Además de un odontoides, metacarpiano, un pulgar y un diente. Sufrió la Perforación de los dos pulmones.

Después de soldarle el andamiaje con varias cirugías, las más delicadas practicadas en la columna vertebral, el colombiano inició una vuelta a la vida. Estuvo a punto de quedarse parapléjico según constató desde el hospital en el que fue intervenido.

“Después de haber tenido un 95% de probabilidad de haberme quedado parapléjico y casi perder la vida haciendo lo que más me gusta hacer... Casi me mato, pero I’m back”, escribió entonces el colombiano. En cuanto recibió el alta del centro hospitalario, Bernal inició una fulgurante y exitosa rehabilitación en busca de sí mismo.

Recuperación exprés

Solo dos meses después del accidente, Bernal se reencontró con la carretera. El retorno, el primer contacto para el camino de vuelta. “El día más feliz de mi vida. Después de 20 huesos rotos aquí estoy y tengo ganas de más. Nos vemos en la carretera muchachos”, expuso.

“Lo duro no fue estrellarme contra un bus a más de 60 km/h, lo duro fue el levantarme, aceptar lo sucedido, empezar de cero y estar de vuelta con la cabeza en alto”, describió Bernal, que regresó a la competición en agosto desde ese mismo curso. Su primer dorsal desde aquel terrible accidente.

Evidentemente, el colombiano no era el mismo. Imposible tras las severas secuelas que le dejó el accidente. En realidad, nadie espera al ciclista que fue, el que hiló el Tour con el Giro. Bernal es otro, distinto.

“Es especial, es un supercampeón y por eso pudo tirar adelante”, definió Xabier Artetxe, que fue el técnico que siempre cuidó de él hasta que el de Larrabetzu concluyó su andadura en el Ineos a finales de la pasada campaña.

Avance y mejoría

Después de su regreso, Bernal fue equilibrándose, si bien no pudo acceder al estatus anterior a la terrible caída. Con todo, el pasado curso fue tercero en la Volta, séptimo en la París-Niza, podio en O Gran Camino, décimo en Romandía o cuarto en la Vuelta a Suiza.

En el Tour finalizó en la posición 29ª. Fue su última competición hasta su inicio en la temporada 2025, en la que le esperaba la redención y la sensación imbatible de la victoria.

Sucedió en los nacionales de Colombia, disputados en Bucaramanga. Un lugar para siempre en la memoria de Bernal. Tres años después de su terrible caída, el colombiano se reencontró con la victoria en la crono el pasado jueves y remató la dicha con el oro en ruta el domingo.

Enorme alegría

Felicidad al cuadrado. Su anterior victoria databa del 30 de mayo de 2021, cuando se coronó en el Giro. La vida era color de rosa hasta el fundido a negro de enero de 2022.

“1347 días y muchas cosas pasaron desde mi última victoria, hoy campeón nacional de TT. Pensé en retirarme varias veces pero algún día prometí que si volvía a ganar otra vez, la primera se la dedicaría a Dios por darme mi segunda oportunidad de vivir”, expuso en las redes sociales.

Tras la conquista de la crono, se subrayó en ruta. “El mensaje que quiero dar hoy es que, a pesar de todas las cosas malas que nos puedan pasar, siempre uno puede dar algo mejor y esta carrera es para todos ustedes”, destacó. Probablemente Hemingway estaba en lo cierto. Bernal se ilumina tres años después.

11/02/2025