La plataforma ecologista Eguzki ha solicitado al Ayuntamiento de Hondarribia que encargue y apruebe el proyecto de restauración de la aliseda, hábitat de bosque ribereño, que se eliminó en el ámbito de Zaldunborda entre los año 2018 y 2019 como previa de los trabajos de construcción del gran centro comercial previsto en aquel entonces.
Tras la paralización del proyecto debido a la anulación del Plan General de Hondarribia por parte del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, el macrooulet quedó sin cobertura legal. Ahora, un reciente informe del Departamento de Medio Ambiente del Gobierno Vasco, emitido en el marco de la Evaluación Ambiental Estratégica Ordinaria del nuevo Plan General, advierte al Consistorio de la necesidad de adoptar medidas correctoras en Zaldunborda dirigidas a la preservación del patrimonio natural.
Esta evaluación del Gobierno Vasco es la que ha dado pie a la petición de Eguzki. Como subrayan los ecologistas, en el informe ya se solicitaba una reordenación del Plan Parcial de Zaldunborda para que incluyera más espacios verdes, tratando de preservar lo máximo posible de las dos hectáreas de aliseda cantábrica del ámbito. “ Las obras, además, se iniciaron de manera ilegal, tal y como denunciamos colectivos ecologistas”, recuerdan desde la plataforma.
Por todo ello, desde Eguzki han querido denunciar la permisividad de las administraciones ante estas actividades “que atentan claramente contra el medio ambiente”. La eliminación de la aliseda se realizó además, como incide Eguzki, en una zona que, debido al carácter controvertido del proyecto del outlet, era un foco mediático, y no en un lugar remoto en la que pudiera pasar desapercibida. “Este atentado ecológico se podía y se debía haber evitado”, critican.
Al mismo tiempo, los ecologistas aseguran desconocer si los responsable de la eliminación de la aliseda están formalmente identificados, ni si alguna administración ha abierto diligencias al respecto, puesto que el informe no lo indica. “Existen indicios suficientes para considerar que la eliminación de este hábitat se encuentra entre las infracciones previstas en la Ley”, aseveran desde Eguzki.
En definitiva, para los miembros de la plataforma lo prioritario es poner en marcha el plan de restauración de esas hectáreas de bosque de ribera, pues ya han pasado tres años desde su eliminación, pero también exigen que se depuren responsabilidades.