En puertas de que se produzca hoy miércoles la segunda ronda de contactos del consejero Azpiazu con los partidos de la oposición para negociar los Presupuestos vascos, la principal incógnita sigue siendo si habrá margen siquiera para negociar con los grupos. EH Bildu criticó ayer martes la forma en que el Gobierno vasco descarta abordar el debate fiscal, y trató de diferenciar a su coalición del planteamiento de otros grupos, asegurando que solo proponen abrir el debate (Elkarrekin Podemos-IU y PP+C’s plantean medidas concretas). En una entrevista concedida ayer martes a Radio Euskadi, la portavoz parlamentaria, Maddalen Iriarte, volvió a mostrarse crítica, y también afeó al Gobierno que, a su juicio, no busca soluciones que van a la raíz de los problemas.
“Yo lo que le pido al Gobierno es que sea realista. Y que haga un ejercicio de anticipación. ¿Qué más tiene que pasar en Osakidetza? ¿Vamos a hacer algo para hacer frente al cambio climático?”, se preguntó. Iriarte añadió que este Presupuesto “nos puede permitir hacer unas inversiones para comenzar un tránsito”. “Existe un colchón que se puede utilizar. En la reunión atenderemos a la respuesta que nos dé el consejero. Los temas que hemos puesto encima de la mesa son de sentido común y que comparte una gran mayoría de la sociedad vasca. En fiscalidad lo único que decimos es que hay comenzar a hablar”, insistió. Sobre Osakidetza, dijo que “hay que hacer una reflexión profunda que va más allá de contratar médicos extracomunitarios”, más allá de los “parches”.
El Gobierno vasco cree que es difícil el acuerdo porque las propuestas de los grupos desbordan el marco económico con muchos millones sobre la mesa, o bien inciden en cuestiones que no son de su competencia, como la fiscalidad, que corresponde a las Juntas Generales. Sí se abordó en la anterior legislatura a través de un acuerdo con el PP, pero en aquel momento el Ejecutivo carecía de mayoría absoluta. A pesar de las dificultades, Azpiazu ha realizado un ejercicio de creatividad para presentarles hoy miércoles una contraoferta que trata de buscar un encaje a sus propuestas.