El 22% de las mujeres elige cursar ingenierías o ciencias frente al 43% de los hombres

La brecha de género en la elección de estudios universitarios es evidente y aunque en los últimos años se han puesto en marcha diversas iniciativas para atraer a las mujeres hacia las denominadas carreras STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas), la realidad es que los avances son lentos. Según los últimos datos del Observatorio de Innovación de Navarra, en 2021, el 22% de las mujeres optó por estudiar ingeniería o un grado de ciencias básicas frente al 43% de los hombres. Una distancia grande pero que se ha reducido desde 2015 cuando el 18% de las chicas optó por una de estas titulaciones frente al 45% de sus compañeros. Y es que en estos seis años se ha producido un incremento de las mujeres en grados STEM (de 362 a 554) y, actualmente, representan el 40% del total. Ahora bien, ellas se concentran en carreras como Biología, Bioquímica, Ciencias o Biotecnología, donde son mayoría mientras que en las ingenierías su presencia baja al 15-30%.

El alumnado de nuevo ingreso en las dos universidades presenciales de Navarra ha crecido un 18% entre 2015 y 2021, un aumento que es más notorio entre las mujeres que entre los hombres (25% frente a 10%). Del mismo modo, los estudiantes que eligen carreras STEM han pasado de 1.144 a 1.391, un 21% más, y de nuevo el incremento es mayor entre las alumnas (53%) que entre los varones (7%).

Estos datos constatan un ligero cambio de tendencia o al menos un mayor interés de las estudiantes hacia grados científicos (sin incluir los de ciencias de la salud) y tecnológicos. De hecho, en 2015, ellas representaban el 31% del alumnado STEM y en 2021 supusieron un 40%.

Ahora bien, un análisis por las titulaciones de la UPNA y la UN ponen de manifiesto que las mujeres se concentran en grados científicos como Bioquímica, Biología, Biotecnología o Ciencias, o en ingenierías pero de la rama bio o agroalimentario.

Sin embargo, su presencia en las ingenierías de las ramas de Industriales, Informática o Telecomunicaciones, es minoritaria y la comparativa con años anteriores no muestra un claro cambio de tendencia. El pasado 2021-22, según datos del portal de transparencia, el porcentaje de mujeres en los grados de Ingenierías Informática, Mecánica y Eléctrica y Electrónica del la UPNA se sitúo en un 15-17% frente al 12-17% de 2017-18. En Industriales y Diseño Mecánico, el 22-23% del alumnado es mujer (porcentajes que no cambian), mientras que el mayor avance se observa en Teleco, al pasar del 25% al 30%.

En la privada, los porcentajes de mujeres en las ingenierías son algo mayores. Destacan sobre todo el 35 y 39% de mujeres en las ingenierías en Organización Industrial y en Diseño Industrial y Desarrollo de Producto, ya que son las más numerosas en plazas. En Ingeniería Biomédica, como en la UPNA, ellas son mayoría.

Mostrar referentes a las nuevas generaciones

Con el objetivo de reducir la brecha de género existente en la elección de estudios, tanto en aquellas con con sobrerrepresentación de mujeres (Magisterios, Enfermería, Psicología, Trabajo Social o Medicina) como de hombres (ingenierías), la UPNA ha analizado las causas que explican estas preferencias.

Los resultados preliminares del estudio, en el que han participado alumnado de todos los grados, constatan que la principal razón por las que las mujeres no escogen ciertos grados es el desconocimiento (lo opina el 68% del alumnado) seguido de la falta de referentes femeninos y de referentes en los medios. Casi la mitad cree que es porque no les gusta y un 38% cree que las mujeres no se sienten capaces de estudiar ciertos grados.

Otras conclusiones del estudio son que el alumnado de grados muy masculinizados tiene mayor probabilidad de pensar que tendrá salidas laborales, una buena remuneración y buenas condiciones de trabajo, Además valora que gozarán de reconocimiento y prestigio y que tendrán que dominar idiomas, trabajar lejos de su CCAA y poco tiempo libre. Por contra, el alumnado de grados muy feminizados tiene menor probabilidad de imaginarse eso en su profesión, pero valora que se realizará como persona.

Por otra parte, con el objetivo de generar referentes, la UPNA ha puesto en marcha una experiencia piloto en cuatro institutos para visibilizar a científicas y tecnólogas. Además, a través del programa de corresponsales UPNA, personas recién graduadas acuden a centros educativos para relatar su experiencia académica y romper estereotipos.