El aeropuerto de Hondarribia acumula ya dos meses consecutivos superando con holgura la barrera de los 40.000 pasajeros al mes, la barrera por encima de la cual el aeródromo guipuzcoano aspira a asentarse de modo continuado a medio plazo. Si bien los pasados meses de agosto y septiembre, con un mayor número de vuelos a destinos turísticos, han engordado las cifras del aeropuerto, el aumento del tránsito se hace evidente y palpable en la terminal guipuzcoana.
De hecho, los 43.242 pasajeros registrados el pasado mes superan incluso el registro marcado en el mismo mes de 2007, en el que se alcanzaron los 43.218 pasajeros. A partir de entonces, el aeropuerto guipuzcoano entró en una dinámica de pérdida de pasajeros que comenzó a revertirse en el último lustro a raíz del nuevo granulado de la pista, en primer lugar, y más adelante, gracias al nuevo sistema de aproximación satelital.
De hecho, Hondarribia opera hoy con aviones modernos de tamaño medio, olvidados ya los turbohélices, lo que supone reducir el número de vuelos suspendidos o retrasados. Para poner en contexto las cifras de este año, se pueden tomar como referencia el ejercicio 2019, antes de la pandemia de covid, en el que el aeropuerto mostró un buen comportamiento.
Precisamente, los 43.242 viajeros del pasado septiembre suponen un aumento del 34% respecto al mismo mes de 2019. Según informó Aena, el gestor de aeropuertos españoles, el dato acumulado entre enero y septiembre ha sido de 285.845 pasajeros en el aeropuerto de Donostia-San Sebastián, un 17,9% más que en el mismo periodo de 2019.
En cuanto a las operaciones, en septiembre se han registrado 594 movimientos de aterrizaje y despegue, y se han acumulado 4.219 vuelos en los nueve primeros meses del año. La terminal guipuzcoana, ubicada en Hondarribia, dispone de conexiones regulares a Madrid, Barcelona, Sevilla, Málaga y Gran Canaria.