"Repito, que este tema creo que no da más de sí". Asi se ha referido el alcalde Donostia, Eneko Goia, al contencioso sobre el edificio del Bellas Artes, después de que el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 3 de Donostia ordenara paralizar de forma cautelar el derribo interior de la que fue sala de cine. La licencia de rehabilitación concedida, aseguró Goia, se otorgó en cumplimiento del "marco legal vigente y aplicable", siempre considerando que la protección reconocida al edificio es la recogida en el Plan de Especial de Protección del Patrimonio Construido (PEPPUC).
Por contra, la Asociación para la Conservación del Patrimonio Cultural de Donostia, Ancora, ha vuelto a reclamar en rueda de prensa que su representante Alberto Fernández D' Arlasha ofrecido acompañado de Ricardo Burutaran (EH-Bildu), Aitzole Araneta (Elkarrekin Podemos) e Ines Baroja (PP), que el Ayuntamiento "dé marcha atrás" en su decisión de otorgar la licencia que conllevaría, ha añadido, no solo el derribo interior del edificio sino una importante modificación de los elementos externos del mismo para adaptarlos a los nuevos usos previstos.
Con la concesión de la licencia de rehabilitación, ha abundado D' Arlas, el Gobierno de Donosia evidencia que "no está velando por el bien colectivo de la ciudad sino por los intereses de una empresa privada", en este caso la SADE, propietaria del edificio.
Pero el primer mandatario de la ciudad, que ha señalado que los servicios jurídicos del Ayuntamiento ya están preparando las alegaciones pertinentes a la decisión judicial, considera que lo fundamental es conseguir que "la situación se desbloquee". "No hay más que acercarse al edificio de la calle Urbieta y acceder al mismo para ver en qué situación está", ha resaltado Goia que ha vuelto a subrayar que la licencia de rehabilitación otorgada no le genera dudas y que, por contra, responde a una actitud responsable. El Consistorio, ha insistido, "ha hecho todo lo que hay que hacer, lo que se puede hacer dentro de los márgenes de la legalidad a cumplir".
Ancora se sitúa en las antípodas de esta opinión por entender que la licencia concedida conllevará "que solo sobreviva el 20% del inmueble original", "uno de los pocos Palacios del Cine que existen en Europa anteriores a la Primera Guerra Mundial" y que es el protagonista de "la única alerta de patrimonio existente en España" de las 18 activas a nivel mundial.
"Permitir que se derribe el Bellas Artes supondría un despilfarro patrimonial equiparable a la demolición del antiguo Kursaal", ha insistido D'Arlas, que ha recordado que la asociación que representa no solo ha recurrido la licencia de derribo sino también contra el PEPPUC, más concretamente contra la ficha que cataloga al Bellas Artes.
Con el Bellas Artes, ha asegurado el representante de Ancora, el Gobierno local "ha cruzado todas las líneas rojas" al tratarse "probablemente del inmueble más importante de la arquitectura civil de Donostia y que suscita un enorme cariño entre los donostiarras".
"El Ayuntamiento tiene herramientas jurídicas para detener esta barbarie", ha insistido D'Arlas, que ha anunciado que, de ser necesario, Ancora convocará nuevas movilizaciones para detener las actuaciones en el Bellas Artes.