El Ararteko, Manuel Lezertua, ha animado a los ciudadanos a denunciar si la seguridad privada no permite acceder a instituciones y organismos por carecer de cita previa, porque esa actuación es "claramente ilegal".
Lezertua ha comparecido este jueves en una comisión de las Juntas Generales de Álava para informar del caso de un ciudadano que se quejó ante el Ararteko porque no fue atendido en la oficina de la Hacienda foral en Laudio por no tener cita concertada, aunque en ese momento no había nadie atendido en la oficina.
La cita previa debe no debe ser obligatoria
Ha recordado que a finales de agosto emitió una resolución general, válida para todas las administraciones, en la que sostiene que la cita previa debe ser una opción "voluntaria y no obligatoria" de atención presencial a la ciudadanía.
El Ararteko ha explicado que se han dado casos en los que la seguridad privada, incluso fuera de las instalaciones de alguna administración, no ha permitido el acceso de algún ciudadano a su interior por no presentar un resguardo de cita previa.
La seguridad privada "no tiene mandato público"
Ha dicho que esta situación le "indigna bastante" porque este personal no funcionario "no tiene mandato público" para negar el acceso a la administración, y que hacerlo es "claramente ilegal".
En este sentido ha animado a los ciudadanos a que si sufren esta situación acudan al Ararteko y, en un primer momento, a la Ertzainzta o a un juzgado para denunciar que se les ha impedido ejercer su derecho de acceso a la Administración.
Ha recordado que la cita previa para la atención en instituciones y organismos se generalizó a raíz de la covid, pero que el Consejo de Ministros declaró el fin de la crisis sanitaria el 5 de julio de 2023.
"La cita previa puede representar un adecuado sistema de atención ciudadana si queda a la voluntad de la ciudadanía, es decir, si permite a las personas conciliar su vida personal y familiar y pueden elegir el día y la hora a la que acudir presencialmente ante la Administración", ha recalcado.
No se puede imponer en ventanilla
Por ello, este sistema "no puede ser impuesto de manera obligatoria a la ciudadanía para cualquier actuación o trámite, porque no hay una previsión legal que habilite a la Administración" a hacerlo y, en segundo lugar, porque "una decisión de mejora y mejor organización del servicio público también tiene que motivarse en criterios técnicos u organizativos".
La cita previa ajustada a estos criterios tendría su razón de ser para acceder a un segundo nivel de atención especializado con personal funcionario técnico en una materia como, por ejemplo, la tributaria, ha explicado.
Lezertua ha reconocido que las quejas por la exigencia de cita previa es un "goteo continuo" y que el año pasado el Ararteko recibió 25 quejas al respecto.
Ha denunciado que se han dado situaciones paradójicas como la de un ciudadano que acudió sin cita previa a pagar una multa y no se le aceptó el trámite en ese primer momento y se le dio una cita posterior, pero ya con una notificación de apremio de pago.
Por último, el Ararteko ha mostrado su satisfacción porque las recomendaciones realizadas por esta cuestión, tanto a la Hacienda alavesa como a otras administraciones afectadas, han sido aceptadas y se ha eliminado la obligatoriedad de la cita previa, aunque ha apuntado que aún quedan algunas quejas por resolver, como una referida a la Hacienda vizcaína