El Athletic tendrá que esperar a lo que decida el próximo martes, 5 de octubre, el Consejo Asesor del Plan de Protección Civil de Euskadi (LABI) para ver cuándo puede habilitar el 100% de los asientos de San Mamés. El Consejo Interterritorial de Salud, reunido a primera hora de la mañana de este miércoles, ha decidido quitar el límite de aforo en los campos de fútbol al aire libre y aumentarlo hasta el 80% en los pabellones de baloncesto, una medida que estará en vigor a lo largo de todo el mes de octubre. El Gobierno vasco se abstuvo en la votación y tratará dicha cuestión en la reunión del LABI del próximo martes, por lo que las restricciones seguirán vigentes en Euskadi este fin de semana.
De este modo, en el derbi de este viernes entre el Athletic y el Alavés -en el que se podrá comer en el campo-; en los que el sábado y el domingo se disputarán en Lezama entre el Amorebieta y el Sporting y el Athletic femenino y el Real Madrid, respectivamente; así como en el choque entre el Eibar y el Ibiza del domingo en Ipurua solo se podrán ocupar el 60% de los asientos totales. Unas restricciones que afectarán también al Surne Bilbao Basket en su cita del domingo ante el Barcelona en Miribilla, ya que únicamente se podrá ocupar el 40% del aforo máximo del pabellón. Además de Euskadi, también Catalunya ha apostado por mantener las limitaciones, si bien en su caso han decidido aumentar el cupo máximo en competiciones deportivas de más de 10.000 espectadores del 40 al 60%, siendo la subida del 30 al 40% en los pabellones.
En declaraciones a Radio Euskadi, Gotzone Sagardui, la consejera de Sanidad, ha defendido el decreto vigente en la CAV al señalar que "está ahí" y recordar que, si bien el Consejo Interterritorial fija unos máximos, el Gobierno vasco es competente en dicha materia.
Bingen Zupiria, portavoz de Lakua, también se ha manifestado al respecto desde Gasteiz para recordar que Euskadi no se siente "concernido" por las decisiones del Consejo Interterritorial puesto que las cuestiones de aforo son competencia autonómica. Además, ha dejado claro que se trata de "recomendaciones" que "no son de obligado cumplimiento". "Hay un decreto en vigor y hasta que sea sustituido por otro nuevo es el que servirá como referencia", ha agregado.
Así las cosas, habrá que esperar a la reunión del LABI de la próxima semana para ver si se adoptan las condiciones del resto del Estado, a excepción de Catalunya, o si por el contrario se mantienen las condiciones actuales. En tal caso, tal y como sucediera dos semanas atrás, habrá que ver qué papel juega LaLiga de Fútbol Profesional. El organismo que dirige Javier Tebas presentó un recurso ante el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) exigiendo el aumento del aforo, que entonces era del 30%, al 60%, y el juez Luis Ángel Garrido falló a favor de la patronal, lo que obligó al Gobierno vasco a acatar la orden, permitiendo así que el partido entre el Athletic y el Rayo Vallecano pudiera tener un aforo máximo de 31.786 personas.
Ante la posibilidad de que el LABI mantenga el próximo martes las restricciones actuales y de que LaLiga acuda de nuevo al TSJPV, Zupiria, el portavoz del Gobierno vasco, ha apuntado lo siguiente: "Si el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco considera que el aforo debería ser superior, a ellos les corresponde decidirlo".
En lo que al Athletic respecta, el conjunto rojiblanco no tiene partidos como local a corto plazo al margen del derbi de mañana ante el Alavés, ya que después enlazará dos fines de semana sin encuentros, el primero de ellos por los distintos compromisos de las selecciones y el segundo por el aplazamiento del clásico frente al Real Madrid. Es por ello que los futbolistas de Marcelino García Toral no volverán a vestirse de corto hasta sábado 23 de octubre, cuando recibirán al Villarreal en San Mamés a las 21.00 horas. Ese mismo días, además, el club celebrará su Asamblea General Ordinaria de Socios Compromisarios en el mismo escenario y de manera presencial. La cita ante el conjunto castellonense podría ser la primera en la que La Catedral no tenga ninguna limitación de aforo, algo que no ocurre desde el 1 de marzo de 2020 cuando, curiosamente, el Villarreal jugó también de visitante en Bilbao.