Buscar
Athletic

El Athletic deja vivo al Madrid y lo paga (1-0)

Oihan Sancet regatea a Alaba en la gran ocasión que disfrutó
Oihan Sancet regatea a Alaba en la gran ocasión que disfrutó

El Athletic dejó vivo al Real Madrid en el Santiago Bernabéu. Jugó bien durante muchas fases, gozó de un buen número de ocasiones, el líder le generó menos peligro del esperado, compitió€ Pero el desenlace le fue desfavorable. Una historia que se repite en el tiempo, sin más. Se conoce que el Athletic sube su nivel en este tipo de partidos, pero no le es suficiente para hacer caja. Le penalizó su falta de pegada, un mal endémico; la toma de ciertas decisiones del algunos futbolistas en el verde, con mención a Iñaki Williams, el señalado en este debe; y del propio Marcelino, al que le pudo dar un ataque de entrenador a la hora de mover piezas en el cuarto final del choque, sobre todo cuando prescindió de Muniain, el mismo Vencedor o Raúl García, tres de los rojiblancos que habían elevado el músculo de su equipo. Marcó Karim Benzema y no lo hicieron los jugadores del Athletic, que no fueron pocos precisamente, quienes gozaron de claras ocasiones. El Madrid tiene a su Benzema y el Athletic, no. Se trató de una de las razones que explican la derrota de un Athletic que encadena seis jornadas consecutivas sin ganar, que es el otro dato que retrata cierta preocupación.

Las mejores imágenes del partido. Fotos: EFE y AFP

La historia pesa. El Athletic no gana en el Bernabéu desde la campaña 2004-05 y tendrá que esperar otra ocasión más para acabar con su inercia derrotista en el coliseo blanco. No le valió ni el comodín del éxito en la pasada Supercopa. Entonces, funcionó el efecto Marcelino, recién llegado al banquillo rojiblanco. Pero, como se sabe, no hay dos partidos iguales. El asturiano intentó ayer repetir la fórmula de aquella noche histórica en La Rosaleda, aunque el intento fue fallido en la vertiente ofensiva. Lo hizo con la novedad de Oier Zarraga en el once. El canterano ha dado un paso adelante y busca oportunidades como la de ayer para hacerse valer. No compitió en su puesto natural, sino que lo hizo en el costado derecho, lo que ofreció su puntito de sorpresa, porque se esperaba al menor de los Williams, meritorio ante el Granada, o en su defecto a un Alex Berenguer venido a menos y que experimenta su segunda suplencia consecutiva.

A Zarraga se le pide otra cosa. Su perfil quizá no se ajuste al de un extremo tipo y no hay más que rebobinar sus minutos en el tramo final del duelo ante el conjunto nazarí, en el que el getxotarra sacó buenos detalles como socio de Vencedor en la medular. Marcelino, por tanto, renunció a esa versión de Zarraga, al que le penalizó la ubicación por delante de un Iñigo Lekue que pierde fuerza en su impacto, aunque si se sintió más cómodo cuando centró su ubicación en el segundo periodo. A los dos les tocó vérselas con Vinicius, del que dicen está de moda en el Madrid, y a este le valió dos apariciones para forzar sendas amarillas para Zarraga y Lekue.

El plan de Marcelino funcionó a medias en el primer acto. Fue un despropósito en el cuarto de hora inicial, en el que el Madrid maniobró a su antojo a un Athletic desnortado, tardío a la hora de leer el partido que se le pudo ir por el desagüe a las primeras de cambio, pero por fortuna los de Ancelotti amagaron y cuando la tuvieron se toparon con un Unai Simón bien colocado. El fútbol, sin embargo, ofrece su lado caprichoso. Como si se hubiera producido un tiempo muerto virtual, el conjunto rojiblanco se recompuso.

Adelantó su presión en bloque medio-alto, incomodó a Kroos y Modric, los ingenieros del Madrid, Muniain cogió posesión con un Vencedor mejor posicionado y empezó a ver a Courtois. Pasó de la nada a la ilusión, porque gozó de sus buenos minutos, como sucediera en la Supercopa. En aquella ocasión, el Athletic presumió de pegada por medio de Raúl García, que hizo doblete, aunque anoche ocurrió lo contrario. Iñaki Williams sigue negado con el gol y acentúa su ansiedad o falta de calidad en el definición, según se mire. Lo evidente es que disfrutó de dos buenas ocasiones en un intervalo de solo un minuto tras desajustes de Militao y Alaba para superar a Courtois, pero se equivocó, sobre todo en la segunda acción.

Ya se conoce el peaje de perdonar a un equipo como el Madrid, porque también la tuvo Raúl García, al que el meta belga le sacó un remate de cabeza a placer que el Athletic ya cantaba como el 1-1. No fue así y pasó lo de siempre. Son cosas que no cambian. Los leones perdonaron y lo pagaron. El Madrid ya no tuvo piedad en la siguiente que llegó. Le acompañó una pizca de suerte o la olió Benzema, en estado de gracia. El francés se benefició de una pifia de Modric para hacer su gol décimo quinto al Athletic, que ya es su rival fetiche, al que más ha goleado en su carrera.

El Athletic había cogido la buena ola. Le motiva el clásico, en el que se liberó tras coleccionar fiascos ante el Cádiz, Levante y Granada, conjuntos de menor enjundia y que le ponen menos al conjunto rojiblanco, que se subió a las barbas de un Madrid debilitado en el matiz físico. Fue en esa gestión, la de la intensidad, en la que ganó el Athletic, sostenido en el protagonismo de Muniain, la lectura de Vencedor, la puja de Raúl García (curiosamente los tres sustituidos cuando mejor estaba el Athletic) y la velocidad del mayor de los Williams.

Visto lo visto, no fueron argumentos suficientes para puntuar en el Bernabéu pese a sumar más ocasiones, casi todas clarísimas, como las que tuvo Dani García, al que Lucas Vázquez le privó de su primer gol como león; Unai Nuñez, que desperdició un remate de cabeza a bocajarro; Sancet, que lo hizo todo bien pero que se topó con el pie de un Courtois que protegió el triunfo blanco; e incluso de Vesga, al que Militao le sacó con el hombro un toque con la testa casi en la línea de gol.

Ver para creer. O no, porque a este Athletic ya le empieza agobiar tanto desperdicio de cara a la meta rival, para hacérselo mirar. El dato es demoledor. Ha marcado en quince partidos trece goles y dos de estos los han sellado futbolistas del equipo rival.

Ficha Técnica:

REAL MADRID: Courtois; Lucas Vázquez (Min. 80, Nacho), Militao, Alaba, Mendy; Kroos (Min. 80, Camavinga), Casemiro, Modric (Min. 76, Valverde); Asensio (Min. 64, Rodrygo), Benzema y Vinicius.

ATHLETIC: Unai Simón; Lekue (Min. 46, De Marcos), Unai Nuñez, Yeray, Balenziaga; Zarraga, Vencedor (Min. 63, Nico Williams), Dani García (Min. 82, Vesga), Muniain (Min. 70, Berenguer); Raúl García (Min. 70, Sancet) e Iñaki Williams.

Goles: 1-0: Min. 40; Benzema.

Árbitro: Díaz de Mera Escuderos (Comité Castellano Manchego). Amonestó a Moric (Min. 68) y Casemiro (, por el Real Madrid; y a Zarraga (Min. 31), lekue (Min. 43), por el Athletic.

Incidencias: Partido correspondiente a la novena jornada de LaLiga Santander, que debería haberse jugado el pasado 17 de octubre, el disputado en el Santiago Bernabéu ante 33.727 espectadores, según datos oficiales.

2021-12-02T22:49:01+01:00
En directo
Onda Vasca En Directo